Ovidio Guzmán López, hijo de Joaquín Guzmán Loera, “El Chapo”, era prácticamente un desconocido, su nombre no se repetía con cotidianidad cuando se hablaba del Cártel de Sinaloa.
Todo cambió el 19 de octubre del 2019, hace casi un año, cuando en un operativo fallido fuerzas federales lo detuvieron en Culiacán, Sinaloa, y luego -tras una respuesta violenta del cártel en toda la capital sinaloense- lo dejaron ir. El “Culiacanazo”.
Desde entonces, el nombre de Ovidio es una constante cuando se aborda al Cártel de Sinaloa y un dolor de cabeza para la administración de Andrés Manuel López Obrador.
Diversos medios mencionan a Guzmán López incluso como uno de los herederos del poderío criminal que dejó “El Chapo” tras su captura y extradición a Estados Unidos, pero ¿realmente lo es?
Así fue el Culiacanazo, según el gobierno de @lopezobrador_. Este es el momento en que detuvieron a Ovidio Guzmán, hijo de "El Chapo" pic.twitter.com/Ok5qMGSrTe
— La Silla Rota (@lasillarota) October 30, 2019
¿Cuál es el verdadero papel de Ovidio en el Cártel de Sinaloa?
Los primeros pasos en el narcotráfico detectados por las autoridades estadounidenses sobre Ovidio comenzaron en abril del 2008, cuando tenía 18 años.
Desde entonces, Guzmán López es señalado de distribuir cocaína, metanfetamina y marihuana a Estados Unidos, desde México y otros países.
La primera ocasión en que el gobierno de Estados Unidos pusiera su nombre en la lista negra, fue cuando lo fichó del Departamento del Tesoro en junio del 2012.
En esa ocasión, Guzmán López es señalado por jugar un papel importante en las actividades de narcotráfico de “El Chapo”, sin mencionar que sea un jefe del cártel.
La primera orden de aprehensión contra Ovidio surgió en febrero de 2019 en Estados Unidos, luego de que “El Chapo” fuera declarado culpable.
Se trata de la misma orden de aprehensión que derivó en el “Culiacanazo”.
En la acusación aparece el nombre de su hermano, Joaquín Guzmán López, otro “desconocido” mediáticamente en el mundo del narcotráfico.
Si no hubiera sido por el “Culiacanazo”, Ovidio sería tan “conocido” como su hermano Joaquín.
Durante el juicio de Joaquín Guzmán Loera, Ovidio Guzmán López fue mencionado en una sola ocasión.
Dámaso López Núñez, “El Licenciado”, acusó a Ovidio, a Emma Coronel, última pareja de “El Chapo”; y a sus medios hermanos Jesús Alfredo e Iván Archivaldo Guzmán Salazar, “Los Chapitos”; de orquestar la fuga de Guzman Loera del Altiplano en 2015.
En cuanto a rango, muy difícilmente Ovidio es uno de los principales capos del Cártel de Sinaloa, sus medios hermanos, “Los Chapitos”, son los mandamás de la herencia criminal que “El Chapo” dejó en la organización.
Jesús Alfredo, “El Alfredillo”, incluso es uno de los hombres más buscados por la Administración por el Control de las Drogas (DEA, por sus siglas en inglés).
Mientras que Iván Archivaldo, “El Chapito”, fue a todas luces el que orquestó el “Culiacanazo” y evitó la detención con fines de extradición de Ovidio.
Si bien, Ovidio es uno de los operadores prioritarios del Cártel de Sinaloa, no es una de las cabecillas de la organización, según información de las autoridades estadounidenses.
Incluso otros capos del cártel están por arriba de Guzmán López en jerarquía criminal como lo son Ismael Zambada García, “El Mayo”; Aureliano Guzmán Loera, “El Guano”; y Rafael Caro Quintero, “El narco de narcos”.
Los Guzmán López
Ovidio Guzmán López nació el 29 de marzo de 1990 en Culiacán, Sinaloa, es decir tiene 30 años.
Es producto de la relación de Joaquín Guzmán Loera con Griselda López Pérez, la segunda “esposa” de “El Chapo”.
Tiene además tres hermanos: Grisella Guadalupe, Joaquín y Edgar.
De los cuatro Guzmán López, el más conocido era Edgar, quien fue asesinado el 8 de mayo del 2008 por sicarios de los Beltrán Leyva.
Joaquín es el menos conocido de los hermanos, su nombre aparece en la acusación de Estados Unidos contra Ovidio.
Grisella Guadalupe es la única de los Guzmán López que no es señalada por supuestos vínculos con el narcotráfico.
Su nombre surgió a principios de año cuando se casó en la catedral de Culiacán -aunque algunos aseguran que quien en realidad se casó fue Alejandrina, otra hija de “El Chapo”-, unos meses después del “Culiacanazo”. Imágenes de la boda se difundieron ampliamente en redes sociales.
rgg