Angela Merkel, canciller de Alemania, externó su preocupación por la falta de contrapesos en el País, según afirmó el director de Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, Abel Barrera.
Durante el desayuno privado del sábado, Merkel convivió con la columnista Denise Dresser, el periodista Leonardo Curzio, la senadora Gabriela Cuevas, Regina Támes, del Grupo de Información en Reproducción Elegida (GIRE), y la hermana Consuelo Morales, directora de Ciudadanos en Apoyo a los Derechos Humanos (Cadhac), quienes recibieron el Premio Franco Alemán de Derechos Humanos "Gilberto Bosques".
"Le preocupa que no haya contrapesos políticos, que no haya sobre todo un Poder Legislativo que pueda pedir cuentas al Ejecutivo, que no haya un Poder Judicial con esa fuerza de hacer valer el Estado de Derecho", narró Barrera en entrevista a su salida del encuentro.
Los invitados de la Canciller expusieron la situación de crisis de derechos humanos derivada por el combate al crimen organizado, así como los asesinatos de periodistas, los casos de desaparecidos y la violencia contra las mujeres.
Según Barrera, los presentes hicieron especial énfasis en la impunidad y la corrupción, flagelos que urgieron a combatir como parte de un acuerdo global.
Agregó que Alemania tiene el compromiso de dar seguimiento a la colaboración en derechos humanos con el Gobierno mexicano y con las organizaciones civiles.
El defensor describió a Merkel como una persona sensible, dispuesta a escuchar y entender lo expresado por defensores y periodistas.
Con información de Reforma
fmma