Pese a que la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) avaló el proyecto de Santa Lucía luego de calificarlo como “ambientalmente viable”, la construcción seguirá suspendida juridicamente, pues aún le falta numerosos requisitos por cumplir.
El Poder Judicial de la Federación no condicionó la construcción del Aeropuerto ÚNICAMENTE a la autorización del impacto ambiental, que sería otorgado por la Semarnat, sino que también debía contar con estudios, dictámenes y permisos en materia cultural, arqueológica, de seguridad, de viabilidad aeronáutica, y de estrategia social, política e interinstitucional.
Mexicanos Contra la Corrupción (MCC) señala que al día de hoy, se encuentran vigentes once suspensiones judiciales que condicionan dicho proyecto al cumplimiento de los requisitos indicados.
Además MCC señaló que el artículo 10° de la Ley de Aeropuertos indica que para que pueda construirse un aeropuerto civil, el encargado del proyecto debe contar con un título de concesión, el cual únicamente se le puede otorgar a una sociedad mercantil. La Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) quien, como lo ha afirmado el Gobierno de México, será la encargada de construir y operar el Aeropuerto de Santa Lucía, ni cuenta con título de concesión ni es una sociedad mercantil.
La construcción de un Aeropuerto Internacional no admite improvisaciones: es necesario que se cumpla a cabalidad lo que establecen las leyes mexicanas y los tratados internacionales.
Resolución de la Semarnat
Gaceta Ecológica 2019