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CDMX, sin capacidad para atender violencia de género

'En la Ciudad de México siempre ha existido la violencia interpersonal, comunitaria, una violencia que se lleva a cabo entre personas de un mismo espacio (...)'

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CIUDAD DE MÉXICO (La Silla Rota).- Los recientes casos de violencia en la Ciudad de México, en especial contra mujeres, reflejan desde una perspectiva jurídica, una vez más, que no existen las capacidades de investigación suficientes, así como no hay los recursos humanos calificados para abordar esos fenómenos, considera Armando Rodríguez Luna, secretario general del Colectivo de Análisis para la Seguridad con Democracia (Casede).

“En realidad es un mal sistémico la falta de capacidades en este país para investigar de manera adecuada todos los casos de delito, en específico los de homicidio y feminicidio. El problema es que se carece de recursos humanos suficientes y por otro lado los funcionarios no están capacitados para abordar estos fenómenos que cada vez son más complejos”.

Agrega que lo que se puede observar como una violencia verbal  o simbólica hacia la mujer, gradualmente se traduce en una violencia física y en este sentido este tipo de violencia no solo son golpes, o maltrato, sino que puede llegar a la tortura incluso al homicidio.

Además este tipo de violencias ya no son perpetradas solo en ciertos contextos violentos sino ahora se observan en otros tipo de espacios.

“Se ha planteado en estudios que las mujeres son más vulnerables en espacios familiares y de hecho son más vulnerables frente a actores que son conocidos por ellas, ya sea familiares directos o indirectos, amistades o novios. Las violencias se han exacerbado, hay diferentes tipos de violencia que impactan cae vez más a las mujeres de diferente manera”.

Rodríguez Luna indica que la Ciudad de México nunca ha sido un santuario ajeno a la delincuencia, lo que sucede es que en los últimos 10 años siempre destacaban lugares como ciudad Juárez, Culiacán, Monterrey, Acapulco, y la CDMX por diversas razones se ha visto alejada a este tipo de reflectores, pero porque había predominado en el país la violencia relacionada con la delincuencia organizada.

“En la Ciudad de México siempre ha existido la violencia interpersonal, comunitaria, una violencia que se lleva a cabo entre personas de un mismo espacio comunitario y violencia entre personas que además no solo se conocen, sino que se reconocen como agentes pasivos activos que al final ejercen un proceso de dominación”.

El especialista en criminalista explica que la CDMX es un espacio ideal para el florecimiento de este tipo de violencia, porque en ciudades como esta se exacerban las desigualdades, así como la discriminación y estigmatización y estos tres juntos encuentran en la mujer aspectos más sobresalientes para poder vulnerarlas e incluso matarlas.

Y a eso se agrega la falta de sensibilización por parte de la Procuraduría General de Justicia (PGJ), como se vio en el caso de la joven hallada en Ciudad Universitaria de la UNAM, para tratar la violencia contra la mujer.

“Fue lamentable la actuación, reflejó falta de sensibilización y falta de conocimiento de los protocolos para el tratamiento de las víctimas. (La PGJ) no ha demostrado que ha aprendido las lecciones en cuanto a comunicación social y en cuanto a investigación judicial y en cuanto a la forma que desarrolla estas investigaciones con relación a la prensa”.

En este caso se evidenció que una reacción social ejerció más presión sobre la institución, sin embargo la PGJ todavía no ofrece elementos para poder determinar que busca al culpable o culpables. Tampoco actúa en función de restituir el daño a las víctimas.

“Esto habla de la falta de investigación, incluso de la negligencia para poder llevar a cabo las facultades para lo que están encomendados. No hacen investigación judicial, simplemente van cerrando averiguaciones previas para generar números que puedan reportar y esta ineficacia y negligencia de la procuración de justicia, que es sistémica en el país y en particular en la CDMX, es un incentivo más para cometer este tipo de delitos. la violencia como la delincuencia”.

Además, en cuanto al hecho, se tiene que revisar cuáles son las condiciones que permiten, que en este caso, Ciudad Universitaria se esté convirtiendo en una zona de alto riesgo para los estudiantes y para las mujeres.

“Hay que recordar que por lo menos desde hace cuatro años se están denunciando diversas acciones delictivas y de violencia contra la comunidad universitaria, desde la venta de drogas hasta el acoso constante a las alumnas dentro de las propias instalaciones universitarias, particularmente CU se ha convertido en un espacio de riesgo para la comunidad.”

Señala que tampoco se observa que exista por lo menos que hayan desarrollado las autoridades universitarias esquemas para proteger a la comunidad o bien para generar campañas de concientización para prevenir ciertos tipos de violencia al interior de la UNAM.