GUADALAJARA.- Era el 18 de marzo de 2018 cuando siete jóvenes acudieron a una finca en Tonalá, Jalisco. El motivo del viaje era realizar una serie de grabaciones para una tarea, pues cuatro de ellos eran estudiantes de Cine.
Al día siguiente, todos regresarían a sus casas. Uno de ellos se fue primero en un taxi, tenía pendientes que atender. El resto se fueron más tarde en dos vehículos. En el camino, uno de los vehículos donde viajaban los jóvenes se calentó, tuvieron que parar y con ellos el otro vehículo.
Al poco tiempo, arribó una camioneta con el logotipo de la Procuraduría General de la República (PGR), de donde se bajaron hombres con armas largas, algunos con pasamontañas.
Los hombres armados se llevaron a tres de los seis jóvenes: Javier Salomón, Marco Francisco y Jesus Daniel. Al resto las dejaron ir porque eran mujeres. De ellos no se volvió a saber más, autoridades de Jalisco señalaron que fueron torturados, asesinados y disueltos en ácido.
CÁRTEL NUEVA PLAZA SALE A LA LUZ
Detrás del atroz crimen, que en su momento provocó la movilización de innumerables personas exigiendo justicia en varias parte del país, estaba el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Los jóvenes fueron confundidos con miembros del hasta entonces desconocido Cártel Nueva Plaza, quienes comenzaron una guerra contra la organización de Nemesio Oseguera Cervantes, “El Mencho”.
La finca, creían los miembros del CJNG, era propiedad de Diego Gabriel Mejía, “El Diego”, uno de las cabecillas del Cártel Nueva Plaza y que había sido detenido meses atrás. Vigilaban el lugar esperando que regresara ahí cuando obtuviera su libertad y entonces acabar con él. De ahí la confusión.
ORIGEN DEL CÁRTEL NUEVA PLAZA
El Cártel Nueva Plaza había surgido un año atrás de la desaparición de los jóvenes estudiantes de cine, cuando miembros del CJNG dejaron la organización para fundar una célula independiente y disidente contra “El Mencho”.
El hombre de llamó a la deserción fue Carlos Enrique Sánchez Martínez, apodado como “El Cholo”, uno de los hombres de mayor confianza de “El Mencho”.
La relación entre ambos capos se rompió cuando un colombiano, operador del CJNG, fue asesinado. Se desconoce si la traición vino de “El Mencho” o de “El Cholo”, pero sucedió.
A las filas del Cártel Nueva Plaza se sumó uno de los miembros fundadores del CJNG, Erick Valencia Salazar, “El 85”.
Valencia fue detenido en 2012, cuando el CJNG aún no llegaba a su auge criminal. Su detención, en Zapopan, Jalisco, fue traducida por el capo como una traición de “El Mencho” para abrirse paso en la cúpula del cártel.
Sin embargo, en 2017 fue liberado por violaciones al debido proceso en su caso. A su regreso al campo criminal, decidió juntarse con “El Cholo” para pelear contra “El Mencho”.
EL APOYO DEL CÁRTEL DE SINALOA
Por si fuera poco, trasciende que el Cártel Nueva Plaza es apoyado por el Cártel de Sinaloa en su lucha contra “El Mencho”.
Cuando recién se independizó “El Mencho” y dejó “Los Matazetas”, brazo armado del Cártel de Sinaloa, para formar su propio cártel, ambas organizaciones, si bien no eran aliadas, no se encontraban en guerra, pero la expansión del CJNG la detonó.
Entidades como Colima, Nayarit y Baja California Sur, han resentido la violencia entre ambos cárteles.
La enemistad se hizo más cuando “El Mencho” apoyó a “Los Dámaso”, una célula del Cártel de Sinaloa encabezada por Dámaso López Núñez, “El Licenciado”, en su guerra contra “Los Chapitos”, para hacerse del vació que dejó la detención y extradición de Joaquín Guzmán Loera, “El Chapo”.
“El Mencho”, incluso, secuestró a Jesús Alfredo e Iván Archivaldo Guzmán Salazar, “Los Chapitos”, en 2016 cuando estos se encontraban cenando en un restaurante en Puerto Vallarta, Jalisco. Luego de negociaciones y millones de pesos entregados, los hijos de “El Chapo” fueron liberados.
La enemistad es tal que José Antonio Yépez Ortiz, “El Marro”, líder de Cártel Santa Rora de Lima, también enemigo del CJNG, ha amenazado con aliarse con el Cártel de Sinaloa para sacar a “El Mencho” de Guanajuato.
LA VIOLENCIA EN JALISCO Y LA INCURSIÓN EN GUANAJUATO
Desde entonces, la disputa entre el CJNG y Cártel Nueva Plaza ha incrementado los muertos en Jalisco.
En 2015 y 2016, las víctimas de homicidios dolosos en la entidad apenas alcanzaban los mil anuales, a partir del 2017 la cifra superó los 2 mil casos, el año pasado hubo 2 mil 676 asesinatos, contra los mil 236 del 2016. De enero a junio de este año los homicidios dolosos suman mil 276.
Se presume que el Cártel Nueva Plaza también ha incursionado en Guanajuato, donde el CJNG tiene una importante presencia y también, en su disputa con “El Marro”, ha provocado un aumento en la violencia.
Guanajuato pasó de tener mil 96 asesinatos en todo 2016, a sumar 2 mil 293 homicidios dolosos en apenas seis meses del 2020.