Main logo

Caída del cabello o acné, daños colaterales de covid o del cubrebocas

Mientras a Elizabeth la covid-19 o la tensión asociada a la enfermedad le causaron la caída de cabello, a Ximena usar cubrebocas le ha provocado acné

Escrito en NACIÓN el

"Cuando estaba en la regadera veía mis cabellos tirados, cuando me cepillaba se caían más, en la almohada los encontraba al despertarme y cuando pasaba mis dedos por mi cabello siempre me quedaban más de 10 cabellos, era muy desesperante y preocupante”, relata Elizabeth, quien fue caso asintomático de covid y sufrió esta experiencia que aún no se sabe a detalle si está asociada al virus o al estrés que viene con él.

La joven explica que se hizo la prueba en mayo porque un familiar dio positivo y las dos semanas que transcurrieron desde que se enteró que también tenía el virus fueron muy estresantes, pues aunque estaba bien vivió con el pavor de desarrollar algún síntoma y tener complicaciones.

En agosto fue cuando empezó la abundante caída de cabello. Elizabeth dice que antes del coronavirus sólo retiraba algunos del cepillo o del peine cuando salía de bañarse, no tenía mayor problema cuando se lo amarraba o al tenerlo suelto.

Sin embargo, de pronto empezó a notar que había cabellos en todas partes en las que ella estaba, si bien no eran mechones, sí era una cantidad que ella estima como cinco o seis veces mayor a la normal.

Entonces todo se volvió un círculo vicioso, porque la covid-19 o la tensión asociada a la enfermedad le causaron la caída de cabello, pero este problema le generaba más estrés y ansiedad. “Llegué a un punto en el que me revisaba con miedo a notar algunos espacios sin cabello en mi cabeza, ese era mi mayor temor, no sucedió, pero sí disminuyó mucho la cantidad, sí me hacía una trenza se veía más delgada de lo normal”, explica.

“Ya estaba tan desesperada que compré diferentes champúes, acondicionadores, con la esperanza de que el problema mejorara”, dice la joven mujer de cabello castaño y largo a la mitad de la espalda, “incluso pensé en cortarlo, porque todos recomiendan eso, pero no me animé, opté por esperar y poco a poco disminuyó la caída”.

CORTARSE EL CABELLO NO EVITARA QUE SE CAIGA

Abril Martínez Velasco, dermatóloga de la Clínica de Oncodermatología de la UNAM, explicó que el estrés, y algunas enfermedades como la covid-19, ocasionan que el ciclo del pelo se acorte debido a lo que se conoce como efluvio telógeno.

“Cuando el cuerpo tiene un estrés fisiológico considerable como operaciones, nuevos medicamentos o enfermedades fuertes como la covid-19, hay una inflamación sistémica muy fuerte. El cuerpo dice: ‘Voy a usar esta energía para sobrevivir’, le recorta el presupuesto al pelo y entonces en lugar de que el 10% esté en descanso, 50% del pelo está en telógeno y el pelo se cae masivamente”, detalla.

La especialista de la UNAM señaló que el 10% del pelo se encuentra en la fase de descanso, denominada telógena, que es la última de la vida del cabello donde reposa, no crece y permanece unido al cuero cabelludo durante al menos tres meses, tras ese periodo surge la caída. Por eso los pacientes asintomáticos que tuvieron coronavirus en mayo o junio experimentaron este problema entre agosto y septiembre.

Si te encuentras pasando por esta situación y piensas cortarte el cabello para remediarlo, piénsalo dos veces, ya que la especialista indica que esto no va a cambiar nada, porque el pelo ya está destinado a caerse desde tres meses antes debido a los cambios antes mencionados.

Martínez Velasco recomienda la especialista es consumir un suplemento con hierro, vitamina D o un antioxidante para mejorar esta situación y si en dos o tres meses el problema no mejora, será necesario buscar un especialista.

ACNÉ, EL DAÑO COLATERAL DEL CUBREBOCAS

Siempre es mejor prevenir que lamentar, así que el cubrebocas se ha posicionado como la medida más efectiva para protegerse de contagios de covid-19; sin embargo, no todo es miel sobre hojuelas, porque pasar mucho tiempo con éste en la cara puede llegar a generar problemas en la piel.

“Cuando estaba en la secundaria tuve muchos problemas de acné, probé varios tratamientos y poco a poco desaparecieron, pero ahora algunos granos regresaron a mi cara por usar cubrebocas”, cuenta Ximena.

“No son brotes grandes, son uno o dos que aparecen en mis mejillas o mi barbilla, me molestan mucho, pero prefiero eso a contagiarme”, dice la mujer, quien muestra dos barritos cerca de su oreja y otro más en uno de sus cachetes.

Las enfermedades de la piel son problemas de salud comunes en la población, pero durante estos meses de pandemia se han vuelto más frecuentes por factores como el estrés, el abandono de tratamientos, por el constante lavado de manos y por el uso de cubrebocas.

Respecto al acné, Selene Gutiérrez Mendoza, médico adscrita a la Clínica de Oncodermatología de la Facultad de Medicina de la UNAM, indicó que “Algunas recomendaciones para cuidar la piel son: lavar el rostro por la mañana y la noche con el jabón adecuado para cada tipo de piel, utilizar cremas emolientes y no usar la misma que se usa en el cuerpo para la cara, usar un filtro solar adecuado, evitar productos irritantes, no aplicar remedios caseros y no maquillarse cuando se usará el cubrebocas”.

Asimismo, es importante elegir un cubrebocas de telas naturales como el algodón y evitar las telas sintéticas, lavarlos todos los días y evitar perfumes en los productos para limpiarlas.

La covid-19 también ha tenido un impacto paralelo en el ámbito de la belleza, si bien pueden parecer situaciones banales por ser problemas asociados a la estética y la imagen personal, en realidad se trata de problemas de salud que también son importantes porque afectan física y emocionalmente a quienes los padecen.

fmma