Por considerar que se trata solo de un “instrumento de control y restricción” para frenar a militantes interesados en postularse como candidatos del Partido Revolucionario Institucional (PRI), liderazgos identificados con el ala crítica de este instituto político plantean terminar con la influencia de la estructura territorial y organizaciones sectoriales en el proceso de postulación de candidatos.
En el preámbulo de la 22 Asamblea Nacional del PRI, que se celebrará el próximo 12 de agosto y en la cual se presentarán -entre otras- propuestas de reforma a los estatutos internos, las corrientes conocidas como “Alianza Generacional” y “Expresión Militante” se pronunciaron por simplificar los mecanismos para que un militante puede aspirar a una candidatura, además de eliminar el requisito de que estos cuenten con respaldo de la estructura partidista.
En entrevista con La Silla Rota, José Alfaro Cázares, diputado en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) e integrante de Alianza Generacional, consideró que impedir a un militante que participe en el proceso interno de postulación de candidatos bajo el argumento de que no cuenta con el respaldo de ciertos sectores forma parte de un proceso que ya no es válido.
“Se requiere revisar los requisitos para participar en un proceso interno y con ello me refiero a la necesidad de contar con el apoyo de sectores, organizaciones, estructuras territoriales o consejeros políticos, pues es ahí donde un mal manejo de esos instrumentos los convierte en elementos por los que se controlan los procesos y excluyen a determinados militantes de su participación. Eso es lo que creemos debe desaparecer”, señaló.
Actualmente, los estatutos del PRI en sus artículos 187 y 188 establecen como requisito para los militantes que soliciten ser precandidatos a ocupar un cargo de elección popular contar con el apoyo del 25% de la Estructura Territorial (comités seccionales, municipales, estatales); tres sectores (como la CNOP, CTM y CNC) o en su defecto de organizaciones nacionales; 25% de consejeros políticos y/o 10% de afiliados inscritos en el Registro Partidario.
José Alfaro Cázares consideró que los requisitos deben ser reformulados, no solo por el mal manejo que se le pueda dar al procedimiento sino porque, además, evitan que haya piso parejo entre militantes y aspirantes externos.
“No existe piso parejo entre los simpatizantes y militantes porque los militantes deben reunir más de 17 requisitos incluyendo la necesidad de respaldo de sectores y organizaciones, de estructura dirigente. Frente a la figura de candidatos externos debemos emparejar el piso y eliminar todos aquellos elementos que se han convertido realmente en instrumentos de control y de exclusión en los procesos internos. Resulta absurdo que un externo tenga mayores facilidades para ser candidato del PRI que un militante”.
En ese sentido propuso reducir el apoyo mínimo requerido para que sea del 1% respecto a los militantes inscritos en el registro partidario. Además se sugiere que sea la base militante y simpatizante, cerca de 10 millones de personas, las que definan las candidaturas rumbo al 2018.
Piso parejo
En ello coincidió la aspirante presidencial e integrante de “Expresión Militante”, Ivonne Ortega, quien en entrevista pidió “piso parejo” para los aspirantes a obtener una candidatura, considerando que la propuesta de reunir el 1% de las firmas, permitiría igualar las oportunidades de todos los aspirantes ya sean militantes o externos.
“Vamos pidiendo que el piso sea parejo, que tanto ciudadanos como militantes tengan las mismas reglas. Hoy si eres militante quiere ser candidato tienes que tener la firma de tres sectores organización, un porcentaje de los comités municipales, estatales, un porcentaje del consejo político, un porcentaje de los militantes. Y si eres ciudadano lo único que tienes que tener es prestigio personal. Lo que estamos pidiendo es piso parejo, si hay un ciudadano que quiere participar lo mínimo que puede hacer es obtener respaldo del 1% del padrón de militantes”, expresó.
La ex gobernadora de Yucatán agregó que de modificar los estatutos en este sentido, para ser candidato a la presidencia de la República por ejemplo, se requeriría reunir al menos 80 mil firmas tomando en cuenta que el padrón de militantes es de 8 millones. En ese sentido, agregó: “Si quieres ser candidato a la presidencia de la República y no puedes juntar 80 mil firmas, si no tienes una estructura para reunir es número de firmas ahí mismo te has dado cuenta que difícilmente podrás entrar a la competencia”.
Finalmente, Ivonne Ortega confío en la dirigencia nacional del PRI garantice la legitimidad de la 22 Asamblea Nacional del partido, tras insistir en que bajo criterios poco claros se está limitando la participación de delegados en las mesas temáticas que se celebrarán en Campeche, Jalisco, Estado de México, Sinaloa y Coahuila, en donde se discutirá sobre estatutos, declaración de principios, programa de acción, visión de futuro, así como rendición de cuentas y ética.
“Espero que haya una buena fe por parte de la dirigencia y por eso pedí que se legitime la Asamblea. Lo que más nos puede lastimar como priístas y como militantes es que lleguemos a una Asamblea deslegitimada donde la propia militancia no confíe en lo que se aprobó (…) es una postura en defensa de los militantes que ya lograron ser delegados y que quieren ser escuchados. No estamos luchando para dividirlo para enfrentarlo al contrario estamos luchando para fortalecerlo y hacerlo más rentable”, manifestó.