El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) alertó que la violencia contra niñas y niños ha aumentado durante la pandemia de covid-19, ya que las llamadas para reportar violencia intrafamiliar se incrementaron hasta 80%, mientras que las solicitudes de asilo en refugios crecieron 30%.
Unicef publicó el documento “Protección de la niñez ante la violencia. Respuestas durante y después de covid-19”, en el que destacó que desde el inicio de la contingencia, se han registrado 115 mil 614 llamadas de emergencia al 911 por incidentes como abuso sexual, acoso sexual, violación, violencia de pareja y violencia familiar, mostrando un incremento del 28% en marzo en relación a enero.
Asimismo, la Red Nacional de Refugios indicó que las llamadas para reportar violencia han registrado un incremento del 60 al 80% y las solicitudes de asilo en estos espacios ha incrementado un 30%.
“Las consecuencias del covid-19 en la infancia y adolescencia en México no serán causadas mayormente por la enfermedad en sí; serán más bien secuelas de las medidas necesarias para prevenir el contagio, como la restricción de movimiento, el estrés, la situación económica de las familias, factores que amenazan la protección ante la violencia y el abuso contra la niñez y adolescencia”, señaló Christian Skoog, representante de UNICEF en el país.
“El panorama de violencia contra niñas, niños y adolescentes en México ya era grave antes del confinamiento, pero la pérdida de empleos e ingresos, y otros elementos de estrés intrafamiliar son factores de riesgo asociados a aumentos de la violencia contra la infancia y, tristemente, esos están presentes en muchos hogares en el país en estos momentos. Pero hay soluciones”, resaltó Skoog.
Para combatir la violencia contra niños y adolescentes, Unicef propone acciones inmediatas, como garantizar el acceso a los menores a los servicios de atención y apoyo, brindarles alternativas de alojamiento seguro y difundir información para prevenir las agresiones.
A largo plazo, el organismo de la ONU señaló que se pueden fortalecer las capacidades operativas de las Procuradurías de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes, así como integrar al sistema del 911 los servicios de respuesta inmediatos, y poner la agenda de la protección de los derechos de los menores de edad en la mesa del Poder Legislativo.
Unicef enfatizó en el documento que “en países como México, el nivel de violencia intrafamiliar no debe desestimarse, particularmente en contextos como el actual”. Recordó que incluso antes de la pandemia las encuestas mostraban que el hogar es usualmente el lugar más peligroso para las mujeres y sus hijos.
Además, estas encuestas muestran que seis de cada 10 niños y niñas de uno a 14 años de edad han experimentado disciplina violenta a nivel familiar, situación que se agrava ahora por el confinamiento.