El presidente Andrés Manuel López Obrador hizo una “faramalla” para desestimar los señalamientos de la Auditoría Superior de la Federación (ASF) en la Cuenta Pública 2019, el primer año de su gobierno.
Así lo aseguró el exsecretario de Hacienda y Crédito Público, Carlos Urzúa, en su columna de El Universal, quien cita al Diccionario del Español en México para describir a la “faramalla” como un “gesto exagerado, aparatoso y de poca sustancia”-
La “faramalla” mencionada por Urzúa es la auditoría a la cancelación del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México en Texcoco, que -según la ASF- había costado el triple de lo presupuestado por el Gobierno Federal.
Sin embargo, López Obrador rechazó este diagnóstico de la ASF, quien reculó a las pocas horas del señalamiento del presidente. Luego el mandatario pidió “limpiar” al órgano autónomo y uno de los auditores fue separado de su cargo, mientras el titular, David Colmenares Páramo, fue llamado a comparecer a la Cámara de Diputados.
“La faramalla, el alboroto que fue hecho para obscurecer las otras acusaciones de la ASF en su informe, tuvo como pretexto el costo final de la cancelación de lo que iba a ser el aeropuerto internacional de Texcoco”, señaló Carlos Urzúa en su columna.
Para el exsecretario de Hacienda y Crédito Público, el presidente se centró en el error sobre el NAIM para “menoscabar la credibilidad de todo el informe” de la ASF, lo cual calificó como “preocupante”, pues López Obrador -dice- “tratar de amedrentar a las autoridades de la ASF”.
“Esperemos, por el bien de todos, que ese episodio no influya en el trabajo futuro de los auditores”, señaló Urzúa.
De acuerdo con el exsecretario, el costo de la cancelación del NAIM excedió fácilmente los 240 mil millones de pesos.
“Por un lado, alrededor de 80 mil millones de pesos ya habían sido invertidos o estaban a punto de serlo. Por el otro, más de 160 mil millones en bonos de aquel aeropuerto siguen en manos de inversionistas (muchos de ellos extranjeros). Esos bonos se convirtieron en otro pasivo de la nación”, explicó Urzúa.
El exsecretario de Hacienda y Crédito Público señala además que la ASF señala varias irregularidades en su informe, donde los protagonistas son principalmente Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Aunque Urzúa también pide poner la mira sobre lo que la ASF dice de los programas sociales.