El presidente Andrés Manuel López Obrador exigió a todos los servidores públicos de su gobierno no hacer tratos con ningún miembro de su familia y amenazó con acciones penales si se incurre en algún acto de deshonestidad.
A través de una carta, el mandatario mexicano instruyó a secretarios de gobierno, directores de empresas u organismos paraestatales, así como a servidores públicos en general, a no permitir, bajo ninguna circunstancia la corrupción, el influyentismo, el amiguismo, el nepotismo, ni ninguna “esas lacras de la política del antiguo régimen”.
Les recalcó: “no acepto, bajo ninguna circunstancia, que miembros de mi familia hagan gestiones, trámites o lleven a cabo negocios con el gobierno en su beneficio a favor de sus ‘recomendados’”.
Entre los miembros de su familia que incluyó para estos efectos, el presidente mencionó a su esposa, hijos, hermanos, hermana, primos, tíos, cuñados, nueras, concuños y otros miembros cercanos o distantes.
Ustedes no tienen la obligación de escuchar propuestas indecorosas de nadie. Y en el caso de mis familiares, ni siquiera de recibirlos en sus oficinas o contestarles el teléfono. Nada de nada”, lanzó.
lrc