En menos de tres años, la relación entre el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) de María Elena Álvarez-Buylla, y el Foro Consultivo Científico y Tecnológico pasó del amor al odio, del reconocimiento a la persecución que actualmente tiene a 31 científicos en la mira de la Fiscalía General de la República.
El 17 de enero de 2019, Álvarez-Buylla Roces asistió a la toma de protesta de Julia Tagüeña como coordinadora general del Foro y en su cuenta de Twitter expresó sus felicitaciones.
“El día de ayer estuvimos en la toma de protesta de la nueva Coordinadora general de Foro Consultivo y Tecnológico. Felicito a la dra. Julia Tagüeña por su nuevo cargo. Fue un enorme gusto recibir en Conacyt a colegas, amigos y a tantas personas comprometidas con la ciencia”, escribió en aquella ocasión.
En una de las fotografías se observa en pose solemne a Enrique Graue Wiechers, rector de la Universidad Nacional Autónoma de México, a Álvarez-Buylla aparece con un gesto de media sonrisa, junto a Tagüeña Parga que se mostraba muy alegre por su nuevo cargo, y a José de Jesús Franco López, quien parecía sentirse satisfecho por su labor en el puesto que dejó.
Esta foto parece ser el presagio de la tensa relación que se vive hoy entre la directora del Conacyt y los ahora exfuncionarios del Foro Tagüeña Parga y Franco López, ambos con una carpeta de investigación abierta por el presunto delito de delincuencia organizada, entre otros.
Ese mismo día, Álvarez-Buylla denunció que en el sexenio de Enrique Peña Nieto se transfirieron recursos públicos por alrededor de 50 millones de pesos a distintas empresas, aunque en esta estimación también se incluían erogaciones para fondos, becas y cátedras.
En ese mismo año, Álvarez-Buylla declaró que el Foro Consultivo había realizado una labor importante y lo reconoció como una asociación civil, ahora la Fiscalía General de la República lo cataloga como una empresa privada.
En una entrevista publicada por El Universal, la directora del Conacyt dijo que replantearía la participación de las asociaciones civiles en el ámbito científico. “Eso habrá que pensarlo con más cuidado, sobre todo si reciben el 100% de su presupuesto del Conacyt, ahí hay un conflicto de interés, le pagas a alguien para que diga lo que tú quieres. Se necesitan instancias más colegiadas”, mencionó.
Paralelamente, el Foro Consultivo recibía los primeros embates, pues a partir de ese año dejó de recibir el financiamiento que por ley recibía del Conacyt.
El Foro Consultivo se creó en 2002 y se constituyó como una asociación civil. En el artículo 38 de la Ley de Ciencia y Tecnología se indica que “el Conacyt otorgará, por conducto del secretario técnico de la mesa directiva, los apoyos necesarios para garantizar el adecuado funcionamiento del Foro Consultivo Científico y Tecnológico, lo que incluirá los apoyos logísticos y los recursos para la operación permanente, así como los gastos de traslado y estancia necesarias para la celebración de sus reuniones de trabajo”.
Desde mediados de 2019, el Conacyt desconoció la relación jurídica que había con el Foro Consultivo y decidió no asignarle recursos para su operación. La Mesa Directiva, en la que participan representantes de diversas instituciones como la UNAM y el IPN, mantuvieron diálogo con las autoridades, pero no llegaron a un acuerdo y decidieron promover un juicio de amparo bajo el número de expediente 1440/2019.
Aunque el juez otorgó la suspensión provisional y definitiva para que se le siguiera proporcionando financiamiento a la asociación civil, pero el Conacyt incumplió con este mandato.
Sin embargo, en febrero de 2020 el Conacyt cambió su estatuto orgánico y eliminó el artículo en el que se establecía que el Foro estaba constituido como una asociación civil.
Esto derivó en que el 6 de julio de 2020, Tagüeña Parga presentara su renuncia al Foro y denunciara la inoperabilidad de éste porque el Conacyt no había otorgado los recursos correspondientes.
En entrevista con La Silla Rota en esa ocasión, Tagüeña Parga explicó: "Llega el momento de que el actual Conacyt cumpla con el artículo 38 y entonces dice que no puede hacerlo porque no le quiere dar dinero a una A.C. lo cual no hacía ningún sentido porque el Foro se había vuelto A.C. porque el Conacyt lo había pedido y además, evidentemente hay muchas otras A.C. que reciben dinero".
"Es muy importante mencionar que es un dinero dado directamente por el Conacyt, con base en la ley y que todo el trabajo siempre fue evaluado, siempre fue auditado y siempre se dieron cartas de funcionamiento. Porque ahora de pronto quién sabe qué pasó con el dinero, se sabe perfectamente, está todo auditado y organizado", afirmó.
En julio de este año siguió la pugna, y aunque la Suprema Corte de Justicia sobreseyó el amparo que había interpuesto el Foro, confirmó que fue legal que el Conacyt le otorgara los recursos públicos para su debida operación.
La controversia estalló este lunes, cuando se dio a conocer que el Conacyt interpuso una denuncia ante la FGR y que ésta solicitó a un juez de El Altiplano que otorgara orden de aprehensión contra 31 científicos, seis del Foro y 25 ex funcionarios del Conacyt. Las órdenes de aprehensión le fueron negadas en dos ocasiones.
Ante esto, el Conacyt trató de deslindarse, al señalar que sí interpuso la denuncia, pero indicó que no señaló a posibles implicados.
Durante el proceso judicial y defensa del Conacyt, se hicieron evidentes posibles irregularidades ejecutadas a través de asignaciones directas millonarias a favor del FCCyT A.C., desde distintos fideicomisos del Conacyt. Como consecuencia, la Unidad de Asuntos Jurídicos del Conacyt presentó una denuncia de hechos, sin señalar a persona alguna, ante el Ministerio Público y el Órgano Interno de Control
Incluso este jueves, Álvarez-Buylla dijo desconocer la investigación que realiza la Fiscalía contra los 31 científicos. “No sé de qué me hablas. Yo no vine a acompañar el primer gobierno de la Cuarta Transformación a acusar absolutamente a nadie”.
Mientras el Conacyt se deslinda de la acusación y la FGR dijo que solicitará nuevamente la orden de aprehensión, la comunidad científica cerró filas en torno a los 31 científicos.
Académicos y consejeros universitarios de la Universidad Nacional Autónoma de México, científicos galardonados con el Premio Nacional de Ciencias y Artes, investigadores de la Universidad Autónoma Metropolitana y la comunidad del Centro de Investigación y Docencia Económicas han expresado su solidaridad y han exigido que cese la persecución y el hostigamiento en contra de los científicos.
MJP