Pese a protestas de científicos, el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) insiste en justificar los cambios que quitan los estímulos a investigadores de instituciones privadas y modificaciones a la evaluación, de acuerdo con un documento que presentó a la Comisión Nacional de Mejora Regulatoria (Cofemer).
El Conacyt, que encabeza María Elena Álvarez-Buylla, trata de acelerar el proceso de aprobación del nuevo Reglamento del Sistema Nacional de Investigadores (SNI), por lo que envió un oficio a la Conamer en el que dio respuesta a los 274 comentarios que hicieron los investigadores sobre el anteproyecto.
Este documento era pieza clave para desatorar el proceso que inició el 5 de marzo, ya que la Comer emitió un dictamen total no final y ahora deberá dar su resolución.
Al Conacyt le urge que avance el proceso, porque como no se ha aprobado el reglamento, no ha podido emitir la convocatoria 2021 para el SNI, que tendría que haber salido a más tardar en febrero pasado.
Fabiola Perales, especialista en temas de mejora regulatoria, explicó a La Silla Rota que con este nuevo documento se reinicia el plazo máximo de cinco días hábiles que tiene la Conamer para dar su dictamen final, como se cruzan los días de Semana Santa, el límite sería hasta el 7 de abril.
Sin embargo, ése es el plazo máximo que tiene Conamer, por lo que el dictamen final podría ser emitido en cualquier momento y de ser favorable para Conacyt, el nuevo Reglamento del SNI sería publicado en el Diario Oficial de la Federación.
CONACYT JUSTIFICA CAMBIOS EN REGLAMENTO DEL SNI
En el oficio enviado este lunes, Conacyt justificó los principales cambios al Reglamento del SNI, al señalar que no se violan los derechos de los investigadores de universidades privadas al eliminar el estímulo y también indicó que no se modifica el proceso de selección de las comisiones dictaminadoras, entre otros.
En el documento de seis cuartillas firmado por Noé Ortiz Lepez, titular de la Unidad de Administración y Finanzas y Responsable Oficial de Mejora Regulatoria, el Consejo dio respuesta a 12 temas que fueron mencionados en los comentarios en Conamer.
El primero es el de los investigadores de instituciones privadas, al respecto, reiteró la justificación que dio en el Análisis de Impacto Regulatorio del Anteproyecto, en donde señaló que no se violan las garantías de ellos y que si en algún momento cumplen con los requisitos del reglamento, podrán recibir el estímulo económico, pero en el reglamento se les sigue dejando sin esa posibilidad.
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“En ese sentido, la presente medida no atenta contra la dignidad humana ni tiene por objeto menoscabar los derechos y libertades de las personas. Pues como sucede en los hechos, hay una constante movilidad de investigadores entre las instituciones públicas y privadas de educación superior, por lo que si satisfacen los requisitos que establece el reglamento pueden también recibir el apoyo económico correspondiente”, resaltó Conacyt.
Sobre las comisiones dictaminadoras y la evaluación por pares, el Conacyt aseguró que no se modifica el proceso de integración de estas comisiones, por lo que seguirán estando integradas por otros investigadores, como se expresa en el artículo 40. Este es uno de los aspectos que más preocupa a la comunidad científica, porque ven riesgo de que haya discrecionalidad en este proceso.
Respecto a la libertad de investigación, el Consejo dijo que se respeta la ciencia básica y de frontera, así como la libertad de cátedra y la autonomía de las instituciones.
Acerca de los cambios en los beneficiarios en caso de la muerte de un miembro del SNI, que restringe a quienes pueden recibir el apoyo, el Conacyt dijo que esta medida da certeza jurídica a la familia del investigador.
Desde que se dio a conocer este nuevo reglamento, la comunidad de investigadores manifestó su desacuerdo con las modificaciones y señaló que se les dejó fuera de la mesa en la que se discutió el tema. En Conamer expresaron los temas que más les preocupan, pero cayeron en oídos sordos, ya que el documento se mantiene sin cambios.