Main logo

Alertan “años oscuros” para la ciencia con la 4T

Son necesarias modificaciones al anteproyecto de la Ley General de Humanidades, Ciencias, Tecnologías e Innovación: advierte experta

Escrito en NACIÓN el

Si no se hacen modificaciones al anteproyecto de la Ley General de Humanidades, Ciencias, Tecnologías e Innovación, “nos esperan muchos años oscuros para el desarrollo de la ciencia en México, porque a va a depender de la interpretación que una persona haga de esta ley”, alertó María de la Luz Jimena de Teresa, integrante de la junta de gobierno de la UNAM. 

La nueva ley es uno de los temas que quedó pendiente el año pasado para el Congreso. Apenas el 14 de diciembre la directora general del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), María Elena Álvarez Buylla, entregó al presidente Andrés Manuel López Obrador el anteproyecto que elaboró con un grupo técnico. 

La mayoría de los miembros de la comunidad científica pudo conocer el documento de 75 páginas, hasta que se filtró algunos días después y desde entonces La Silla Rota ha documentado diversas preocupaciones de los investigadores sobre los cambios que se hacen, como en materia presupuestal y de toma de decisiones dentro del que ahora se llamará  Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias, Tecnologías e Innovación. 

En entrevista con La Silla Rota, Jimena de Teresa manifestó que este anteproyecto sigue la línea del Conacyt que se ha visto durante esta administración, ya que todas las decisiones pasarán por manos de Álvarez Buylla y se deja fuera la opinión de órganos autónomos. 

“Es el regreso a la verticalidad en la toma de decisiones, desaparece cualquier figura parecida al Foro Científico y Tecnológico, desaparece el Consejo Consultivo de Ciencias de la Presidencia, que se había creado en 1994, con los ganadores del Premio Nacional de Ciencias”, señaló.

La investigadora de la UNAM recordó que en el Foro Consultivo participaban diversos actores de la comunidad, como la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior, la Academia Mexicana de Ciencias, la Academia Mexicana de Medicina y el sector empresarial. 

Sin embargo, en esta nueva ley se “Propone un control autoritario, o sea todo pasa por el Conacyt, todo se decide desde el Conacyt, lo cual no es la forma de avanzar en la ciencia, no puede no consultarse a los actores, a los creadores de la ciencia”, alertó. 

EL PAPEL DE LA CIENCIA NO ES ELIMINAR DESIGUALDADES SOCIALES

Jimena de Teresa destacó que una frase peligrosa del anteproyecto es en la que se menciona que la evaluación del gasto nacional se realizará conforme a criterios e indicadores de bienestar que permitan medir sus efectos en el desarrollo social y económico, ya que el objetivo principal del quehacer científico no es ese y no siempre puede haber resultados a corto plazo. 

“Es atribuirle a la ciencia un papel que no tiene. La ciencia no está para quitar las desigualdades sociales, puede ser un efecto a posteriori de la ciencia. Pensar que lo que va a suceder con la ciencia va a ser bueno solamente cuando tenga un efecto inmediato en el bienestar del pueblo de México, como dice en el anteproyecto de ley, es no conocer la ciencia. Me sorprende que la doctora Elena Álvarez Buylla pretenda que la ciencia tenga un efecto inmediato en la economía, en las diferencias sociales y el bienestar del pueblo de México”, indicó. 

(María Elena Álvarez Buylla, directora general del Conacyt)

La doctora en Matemáticas enfatizó que sería muy grave limitar el financiamiento a proyectos de ciencia sólo porque no tienen un efecto inmediato en el bienestar de la población. A esto se suma que en la nueva ley se dejó fuera la promesa de destinar el 1% del Producto Interno Bruto del país a este sector. 

Manifestó que hay preocupación en la comunidad científica, porque aprobarlo tal cual implicaría un gran retroceso; sin embargo, dijo que hay confianza en que las consultas que se realizarán en la Cámara de Diputados escuchen otras propuestas de ley y se logre que finalmente sea horizontal la toma de decisiones.

(djh)