El ex comisionado Nacional de Seguridad, Monte Alejandro Rubido García, decidió no cambiar de celda a Joaquín "El Chapo" Guzmán, durante el tiempo que estuvo preso en el penal de máxima seguridad del Altiplano, en Almoloya, Estado de México, lo que facilitó su fuga el 11 de julio de 2015.
Lo anterior lo aseguró Juan Ignacio Hernández Mora, ex titular del Órgano Administrativo Desconcentrado de Prevención y Readaptación Social (OADPRS), al rendir su declaración ministerial ante la PGR, el 19 de agosto pasado.
“Hubo una propuesta por parte mía y de Celina Oseguera -coordinadora de penales federales- a finales de octubre de 2014 a la Policía Federal (PF) para realizar la reubicación de Guzmán Loera, es decir, cambiarlo de celda, y se consideró que no era necesario dado que en esa esquina se contaba con dos cámaras de vigilancia de características especiales”.
“Una era de la estancia y otra estaba en el pasillo viendo a la celda y esta consideración fue de forma verbal y esto se mandó consensar desde el Comisionado Rubido, quien instruyó a Ramón Pequeño -ex jefe de la División de Inteligencia de la PF- y quien dio contestación fue David Fernando Rodríguez -director de Monitoreo de la PF-, de que continuara en esa celda Guzmán Loera y la respuesta nos fue hecha de manera verbal a mí, como a Celina Oseguera", declaró.
La versión del ex mando del sistema penitenciario difiere con la de Leonor García, la ex directora Jurídico del Altiplano, hoy presa, quien señaló al ex Comisionado Nacional de Seguridad, Manuel Mondragón, de no mover a “El Chapo” de la celda 20 del área de Tratamientos Especiales.
De acuerdo con fuentes del Poder Judicial de la Federación, el Juzgado Cuarto de Distrito en Procesos Penales Federales de Toluca acordará en breve si cita a declarar como testigo a Rubido, en el juicio contra los funcionarios acusados de la fuga de Guzmán.
Hernández Mora recordó que a fines de 2014, el Secretario de Gobernación, Miguel Osorio Chong, y el propio Rubido, le ordenaron retirarle a “El Chapo” la televisión de plasma que le habían facilitado en su celda.
El hecho de que el presunto capo tuviera una pantalla prácticamente desde su ingreso era una anomalía, pues el propio Hernández Mora reconoce que había una norma no escrita que consistía en darles una televisión a los reos después de cumplir 6 meses en el penal.
Hernández Mora, quien nunca fue consignado por la PGR, asegura que lo primero que hizo al ser informado de la fuga de Guzmán, la noche del 11 de julio pasado, fue avisarle a Rubido.
“Marco al celular del maestro Monte Alejandro Rubido y le informo que no está en su celda Guzmán Loera, él estaba a punto de tomar un avión a Francia y le propuse ponderara que no tomara el vuelo por la gravedad del asunto y me pide que le confirme pormenores”.
Rubido de última hora no subió al avión presidencial que llevaría a Francia a Enrique Peña Nieto para una visita de Estado.
Niega enviar cocaína a EU
Al iniciar su primer juicio de extradición a los Estados Unidos, Joaquín Guzmán Loera compareció ante un juzgado federal y rechazó ser responsable de traficar cocaína a California desde finales de los años 80.
El presunto líder del Cártel de Sinaloa fue presentado en una sala de audiencias del Penal del Altiplano, para ser notificado vía exhorto del juicio de extradición 3/2001, del Juzgado Tercero de Distrito en Procesos Penales Federales del Distrito Federal.
De acuerdo con fuentes judiciales, se trata de un procedimiento basado en una orden de captura girada por la Corte Federal del Distrito Sur de California, con sede en San Diego, por el delito de asociación delictuosa para importar y poseer cocaína con la intención de distribuirla.
Guzmán compareció el 12 de enero pasado tras la rejilla de prácticas, acompañado de tres abogados, para ser notificado de su detención legal con fines de extradición y del contenido de la acusación estadounidense. En la audiencia, sólo se limitó a negar los hechos.
En este expediente, el Departamento de Justicia acusa a Guzmán de haber traficado cocaína a Estados Unidos en latas de chile, cajas de sopa y pollo, por tren, avión, camiones y túneles en la frontera, de 1989 a 2001.
Con información de Reforma