La reforma constitucional a la Ley de Guardia nacional que amplía el uso de las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad pública, fue aprobada con 335 votos a favor, 152 en contra y una abstención. Además, hubo 12 diputados ausentes. ¿Quiénes fueron?
El tablero de votación mostró que la abstención fue de la diputada priista mexiquense, Ana Lilia Herrera. Mientras que otros dos legisladores del tricolor votaron en contra: José Francisco Yunes Zorrilla y Sue Ellen Bernal. La morenista oaxaqueña Inés Parra, también votó en contra.
Entre los 12 legisladores que no asistieron y, por ende, no votaron, están los panistas Rommel Pacheco, clavadista olímpico y miembro de la Defensa; además de la diputada mexiquense Sayuri Núñez.
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Por la bancada priista las diputadas Frinné Azuara y Laura Barrera.
Por el partido de Trabajo se ausentaron María Rosete, Guadalupe Vázquez y Victoriano Wences.
Por Movimiento Ciudadano tampoco asistieron Horacio Fernández y Gerardo Gaudiano. Mientras que el perredista Mauricio Prieto tampoco votó.
Finalmente, por Morena tampoco asistieron Rafael Hernández Villalpando e Iran Santiago Manuel.
Tras un debate parlamentario de siete horas, las bancadas del PRI, Morena y sus aliados políticos los partidos Verde y del Trabajo, aprobaron con el voto de dos terceras partes de los legisladores presentes que las Fuerzas Armadas continúen trabajando en tareas de seguridad pública hasta 2029.
El resultado fue de 335 votos a favor, 151 en contra y cero abstenciones. Sólo participaron 488 legisladores de un total de 500. Al grito de "Sí se pudo, Viva México y Es un honor estar con Obrador" los morenistas festejaron.
Así, el PRI concretó la reforma constitucional que la coalición Juntos Haremos Historia, no pudo concretar por sí sola al no reunir los votos necesarios.
Durante el debate parlamentario partidos de oposición –Acción Nacional, Movimiento Ciudadano y de la Revolución Democrática– expresaron que la medida representa un retroceso en materia de seguridad pública y acusaron un fracaso a la estrategia de La 4T de "abrazos no balazos".
Por su parte los legisladores del PRI que participaron en el debate parlamentario aseguraron que su postura no es un cheque en blanco a Morena. Reiteraron el discurso de su dirigente nacional Alejandro Moreno quien señaló en la última semana que es una medida a favor de los mexicanos ante la falta de entrenamiento y equipamiento de policías estatales y municipales en los últimos años.
El discurso político de Morena y sus aliados se apegó a los argumentos de la iniciativa que presentó el presidente Andrés Manuel López Obrador para que la Guardia Nacional quede adscrita a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) en términos operativos.
La Cámara de Diputados aprobó este miércoles la propuesta emanada del PRI que amplía la participación de las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad pública hasta 2029, una iniciativa vista por la oposición y activistas como un paso más en la militarización del país.