La presentación del Paquete Contra la Carestía y la Inflación, un intento del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador para combatir la elevada inflación, especialmente de la canasta básica durante al menos seis meses, recordó el presentado por Miguel de la Madrid Hurtado en 1987, hace 35 años. El Pacto de Solidaridad Económica.
¿Quién no recuerda la frase “precio pacto”? Allá por los años 90 del siglo pasado era común dicha frase para reafirmar que el valor de una mercancía era el más justo para el vendedor y para el cliente.
Sin embargo, a diferencia de los tiempos del Pacto de Solidaridad, los acuerdos de precios están en principio prohibidos por la ley de competencia económica.
El mandatario hizo la presentación del plan tras reportarse una inflación general de 7.72 % anual en la primera quincena de abril, la tasa más alta en 21 años, en medio de la disrupción en las cadenas de suministro que dejó la pandemia y la invasión de Rusia a Ucrania.
Las estimaciones del Banco de México (Banxico) es que la inflación no convergerá a la meta de 3% hasta principios de 2024.
Rogelio Ramírez de la O, secretario de Hacienda, advirtió que, desde el inicio, estabilizamos el precio de la gasolina" para que no aumente más de la tasa de la inflación, indicó.
Y añadió que el aumento el precio del petróleo dejó un excedente en las finanzas públicas, el cual se utiliza para seguir financiando los subsidios para controlar la tarifa de las gasolinas.
Sin esta medida, añadió, la inflación estaría cerca del 10%, advirtió el funcionario.
El secretario de Hacienda precisó que el plan busca establecer precios fijos en los productos considerados de la canasta básica para evitar que la inflación afecte más el bolsillo de los mexicanos.
No obstante, precisó que de los 40 productos que conforman la canasta básica de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), solo 24 están incluidos en el plan -entre ellos aceite, azúcar, atún, cebolla, frijol, huevo-, que son los que podrán mantener su precio en el país.
"Sabemos que hay otros productos en el índice sobre los que no vamos a poder incidir, pero lo estamos haciendo en aproximadamente un tercio", dijo Rogelio Ramírez de la O.
De acuerdo con el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP), la idea del gobierno de López Obrador es una especie de pacto negociado que buscará efectos durante seis meses para reducir o contener la presión sobre los precios de 24 productos, aunque sin control de precios con topes.
“El programa de combate a la inflación y a la carestía es un instrumento similar al Pacto de Solidaridad Económica que se usó a fines de los años 80 y principios de los 90 para combatir la inflación en México, de manera más o menos parecida a otros programas heterodoxos de la época como los planes Real y Austral de Brasil y Argentina”, opinó el organismo.
López Obrador, a pregunta expresa sobre los Pacto de Solidaridad Económica (De la Madrid), el Pacto para la Estabilidad y el Crecimiento Económico (Salinas de Gortari); Pacto para la Alianza y la Recuperación Económica (con Zedillo); y el más reciente Pacto por México (Peña Nieto), afirmó que es un acuerdo, “ya por eso no se le llama pacto— acuerdo de buena voluntad, y pensamos que va a ayudar”.
¿QUÉ FUE EL PACTO DE SOLIDARIDAD ECONÓMICA?
El Pacto de Solidaridad Económica fue un acuerdo político-económico firmado el 15 de diciembre de 1987 por el entonces presidente de México Miguel de la Madrid con el sector empresarial representado por Agustín Legorreta y Fidel Velázquez, líder de la Confederación de Trabajadores de México (CTM).
Su principal objetivo era evitar que el país cayera en una situación de hiperinflación y que la población percibiera, todavía más, deteriorado el poder adquisitivo y las condiciones de empleo.
Este pacto fue reforzado en 1989 por el presidente Carlos Salinas de Gortari con la firma del Pacto para la Estabilidad y el Crecimiento Económico y buscaba ser exitoso en frenar la inflación y mantener un crecimiento económico moderado, aunque trajo o mantuvo problemas como el deterioro de la capacidad productiva local, la pérdida del valor real de los salarios, y el aumento del desempleo.
Sus objetivos eran incrementar el salario entre 6% y 8%, aumentar el precio de productos y servicios de sector sin contemplar gasolina, electricidad, ni gas, defender la estabilidad de precios, promover el crecimiento económico, estimular la producción agrícola por medio de la canalización del crédito público y renegociar la deuda externa.
Este pacto fue creado entre gobierno, productores, comerciantes y consumidores, en el cual el gobierno se comprometía a no incrementar impuestos, costo de luz, combustibles, agua y teléfono (industrias controladas por el gobierno), en cambio el aparato productor de la iniciativa privada de igual manera se comprometía a mantener precios de sus productos, los comerciantes de igual modo no incrementarían precios a los consumidores y los consumidores no demandarían más incrementos salariales.
LAS FASES DEL PACTO DE SOLIDARIDAD ECONÓMICA
Debido a lo delicado que resultaba el programa del Pacto, y para garantizar su éxito fue necesario darle un seguimiento constante para que se cumplieran las medidas de concertación, por lo que el PSE tuvo cinco fases entre diciembre de 1987 y diciembre de 1988.
De acuerdo con la página de Apuntes Universitarios Edukatvos.com la fase uno se dio en diciembre de 1987 al subir la electricidad y el combustible en un 84% y el gas natural en un 85%. En esta etapa se dio un incremento inmediato al salario del 15%.
La fase dos se dio en febrero de 1988. Los salarios tuvieron un aumento del tres por ciento a partir de marzo. La fase tres inició en marzo de 1988, se mantuvieron congelados los precios, tarifas, salarios y el tipo de cambio establecidos el 29 de febrero.
La fase cuatro comenzó en mayo de 1988, también se mantuvieron congelados los precios, tarifas, salarios y el tipo de cambio establecidos el 29 de febrero; mientras que la quinta fase arrancó en agosto de 1988 manteniendo las mismas circunstancias que la cuarta y tercera fase.
De acuerdo con el artículo “El Pacto de Solidaridad Económica y la inflación en México”, de Fausto Burgueño, publicado en el Instituto de Investigaciones Económicas de la UNAM, describió que el plan de De la Madrid y continuado por Salinas de Gortari fue un programa recesivo que privilegió el aspecto de la inflación, cuando los problemas fundamentales eran el estancamiento de la producción, el desempleo, el injusto proceso de redistribución del ingreso y el monto excesivo de la deuda.
“El Pacto de Solidaridad Económica utilizaba ‘anclas’ macroeconómicas para enfriar la inercia inflacionaria. Era tripartita y cada parte aportaba algo concreto y poderoso: el gobierno se comprometía a un ajuste fiscal sustancial y a mantener una cierta trayectoria del tipo de cambio a futuro; los sindicatos moderaron sus aspiraciones salariales basándose en la inflación esperada o programada hacia adelante en vez de la pasada; y el gobierno negociaba ampliamente con el sector privado organizado una contención de precios”, afirmó el CEESP.
EL PACTO HASTA TUVO SU CANCIÓN
Para apuntalar la estrategia ya con Salinas de Gortari, el productor Luis de Llano realizó la canción “Solidaridad”, en el que se exaltaba el eje del gobierno priista.
Mijares, Angélica María, Vicente Fernández, Pandora, Rigo Tovar, Pandora, Daniela Romo, César Costa, Tatiana, Eduardo Capetillo, Garibaldi, Lucía Méndez, Verónica Castro, Mijares, Timbiriche y la Onda Vaselina unieron sus voces para la pieza musical de casi nueve minutos.
En el coro se escuchaba: “Solidaridad, venceremos desde hoy un adelante llevaremos tu ejemplo; cantaremos a una voz el esfuerzo de unión formando así una gran nación; solidaridad, estaremos desde el niño hasta el anciano en ti creemos y seremos tu más digno mensajero en tiempos malos o muy buenos somos águilas en vuelo”.