“Rosario, no te preocupes, hay que aguantar”, le dijo el entonces presidente Enrique Peña Nieto a su primera secretaria de Desarrollo Social, Rosario Robles Berlanga, en medio de acusaciones por el supuesto uso clientelar de los programas sociales a favor del PRI en Veracruz.
Hoy, seis años después de las palabras de apoyo de Peña Nieto, Robles Berlanga es investigada por la Fiscalía General de la República (FGR) y este martes fue vinculada a proceso por un juez por ejercicio indebido del servicio público. Pasará los próximos dos meses en el penal femenil de Santa Martha Acatitla, en lo que se realizada una indagatoria complementaria.
Incondicional de Enrique Peña Nieto, Robles Berlanga llegó a la administración priista dejando a tras su paso por el PRD y su cercanía a Andrés Manuel López Obrador.
Peña Nieto colocó a Rosario en la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), luego saltó a una olvidada Secretaria de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu).
Rosario tuvo un paso gris en la Sedesol, donde su administración dejó un saldo de 2 millones de pobres más en México.
En 2012 había un registro de 53.3 millones de pobres, para 2014, un año antes de que dejara la dependencia, la cifra aumentó a 55.3 millones en dicha condición, según datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
En Sedatu, Rosario Robes tuvo un perfil bajo, donde terminó el sexenio de Peña Nieto en medio de más acusaciones en su contra.
La cereza en el pastel fue la supuesta de triangulación de recursos señalada por la Auditoria Superior de la Federación (ASF), conocido como “La Estafa Maestra”.
Con la victoria de López Obrador y su combate a la corrupción como discurso de campaña, puso a temblar a varios miembros del gobierno saliente de Peña Nieto, entre ellos a Robles.
Sin embargo, el ahora presidente le dio palabras de tranquilidad, muy parecidas a las de su antecesor, aseguró que Rosario solo era un “chivo expiatorio”.
El respaldo del expresidente y las palabras de su sucesor parecían, Rosario Robles continuó con su vida con toda calma.
Incluso acudió en marzo pasado con Peña Nieto a la boda de la hija de Juan Collado, abogado de famosos políticos, como el propio expresidente, la familia Salinas de Gortari, Carlos Romero Deschamps y demás personajes.
En su Instagram compartió una fotografía disfrutando de la celebración en el paraíso turístico de Acapulco, Guerrero.
Collado fue detenido por uso de recursos de procedencia ilícita y delincuencia organizada. En las indagatorias los nombres los expresidentes Peña Nieto y Carlos Salinas de Gortari aparecían.
El 29 de julio, se dio a conocer que la FGR investigaba y llamaría a declarar a Rosario Robles, mientras su amigo y entonces respaldo se encuentra muy lejos, en España.
Luego la mañana del 30 de julio, López Obrador dijo sobre Rosario Robles y “La Estafa Maestra” que su gobierno no era tapadera, dejando atrás aquellas declaraciones del “chivo expiatorio”.
Por su parte, Robles Berlanga –a través de una carta– rechazó los señalamientos en su contra, aceptó que el próximo 8 de agosto comparecería, como sucedió, pero dijo ignorar las causas de dicho llamado.
Aseguró que no fue hasta que se filtró la información a través de los medios de comunicación que supo los motivos, hecho que calificó como una violación al debido proceso.
En tanto, Rosario Robles promoverá un amparo por dicha violación a sus derechos humanos, según informó su abogado Julio Hernández Barros.
SU CARRERA POLÍTICA
Rosario Robles arrancó su carrera en la política hace 31 años en la dirigencia femenil del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (STUNAM), para luego pasar a formar parte del Comité Ejecutivo del mismo sindicato entre 1988 y 1993.
Ya en 1989 se convirtió en una de las fundadoras del Partido de la Revolución Democrática (PRD), ahí fue consejera nacional secretaria de Movimientos Sociales del CEN y secretaria de Organización.
Como diputada federal fue presidenta de la Comisión de Desarrollo Social.
En mayo de 1997 fue parte de la Comisión Permanente del Congreso durante el proceso electoral federal.
Entre 1997 y 1999 fue secretaria de gobierno en la administración de Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano.
Ante la salida del ingeniero para competir por la Presidencia, Robles se convirtió en la primera mujer en recibir el cargo de Jefa de Gobierno del entonces Distrito Federal en 1999.
Llegó el momento de dejar al PRD para formar parte del gobierno del priísta Enrique Peña Nieto cuando ganó la Presidencia, ahí se hizo cargo de Sedesol y Sedatu.