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Medina Mora, de policía represor y espía a ministro investigado

Sobre sus hombros hay pasajes oscuros como el caso Atenco, el "Michoazanaco", el operativo "Rápido y Furioso", así como "compadrazgos" e investigaciones en su contra

Escrito en NACIÓN el

Eduardo Medina Mora renunció de forme histórica como ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN). Tenía que haber durado 15 años en el cargo, pero no sumó ni cinco.

Medina Mora es un personaje que ha pasado por diversas dependencias de seguridad y procuración de justicia.

Sus andares en los pesos pesados de la seguridad pública se dieron de mano de Vicente Fox, administración en la que fue nombrado director del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen).

Ahí permaneció prácticamente todo el sexenio, para luego ser nombrado titular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) federal tras el fallecimiento de quien fuera su jefe, Ramón Martín Huerta.

BREVE PERO OSCURO PASO POR LA SSP

En el puesto de “súper policía” estuvo poco más de un año, tiempo suficiente para ser marcado por actos represivos protagonizados por la fuerza del orden que comandaba.

El 3 y 4 de mayo, la Policía Federal Preventiva –que operaba bajo órdenes de Medina Mora– protagonizó el llamado caso Atenco, donde uniformados reprimieron con el excesivo uso de la fuerza a pobladores de Texcoco y San Salvador Atenco, Estado de México.

Si bien, el problema comenzó como un altercado menor –donde policías municipales intentaron retirar a vendedores de flores en un mercado de Texcoco– se trató de una represión contra los pobladores que se habían opuesto a la construcción de un nuevo aeropuerto en Texcoco.

Los manifestantes, llamados popularmente “Macheteros de Atenco”, lograron evitar la construcción de aeropuerto.

Las protestas de los pobladores por el operático contra los vendedores de flores en Texcoco terminaron con un saldo de dos jóvenes asesinados, 207 detenidos, entre ellas 47 mujeres, de las cuales 26 denunciaron haber sido torturadas y violadas sexualmente por los uniformados.

Los atropellos realizados por las fuerzas del orden, en ese entonces a cargo de Medina Mora, fueron documentados ampliamente por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), misma que responsabilizó de las vejaciones al Estado Mexicano.   

SU LLEGADA A LA PGR LLENA DE FRACASOS

Luego de dejar la SSP Federal, Felipe Calderón lo nombró titular de la Procuraduría General de la República (PGR).

Desde su oficina como procurador declinó su competencia para investigar los hechos de Atenco, mismos que protagonizó como secretario de seguridad unos meses antes de su nombramiento en la PGR, esto pese a que elementos de la Policía Federal estaban fuertemente involucrados.

Ya como procurador, orquestó el llamado “Michoacanazo”, donde en un operativo la PGR detuvo a 38 funcionarios estatales y municipales en Michoacán –entre ellos alcaldes– por supuestos vínculos con el crimen organizado.

Sin embargo, el operativo fue un fracaso, pues cada uno de los detenidos salió libre al poco tiempo.

Por si fuera poco, frente a la PGR buscó evitar la despenalización del aborto en la Ciudad de México.

Durante una comparecencia convocada en aquel entonces por la SCJN, Medina Mora aseguró que el aborto es “la implícita autorización de matar (al embrión) […] por el simple consentimiento de la madre”.

En su administración ante la PGR también ocurrió el operativo “rápido y furioso”, donde una enorme cantidad de armas norteamericanas fueron dejadas pasar por autoridades mexicanas y estadunidenses a México para que terminaran en manos del crimen organizado.

Esto bajo el argumento de que serían rastradas y aseguradas cuando llegaran a manos de los criminales. Sin embargo, a mitad del operativo las armas se “perdieron”, quedando posiblemente en los arsenales del narcotráfico sin consecuencias.

También acusó falsamente a Alberta, Teresa y Jacinta, tres indígenas de Querétaro, de “secuestrar” a agentes de la extinta Agencia Federal de investigación (AFI), esto como consecuencia de un operativo fallido de parte de los federales.

Eduardo Medina Mora dejó la PGR luego de los innumerables fracasos y polémicas en la dependencia.

EPN, SU AMIGO, LO MANDA A LA SCJN

 

Calderón lo envió, entonces, como Embajador de México en Reino Unido y luego en Estados Unidos, esto pese a no tener ninguna experiencia en materia diplomática.

Regresó a la vida pública mexicana de la mano de Enrique Peña Nieto, quien lo propuso como ministro de la SCJN.

Peña Nieto tenía una relación cercana con Medina Mora, a tal grado que lo respaldó cuando este protagonizó la represión de Atenco cuando Enrique era gobernador mexiquense y luego, en 2015, lo llevó a la SCJN.

Medina Mora fue aprobado como ministro por el Senado de la República, pese a los señalamientos de cercanía con el presidente, los escándalos protagonizados durante su paso por la SSP y la PGR, e incluso ignorando uno de los requisitos para ser parte de la SCJN: haber vivido los últimos dos años en el país, pues desde 2009 vivía en el extranjero.   

LAS TRANSFERENCIAS BANCARAS Y LA SOSPECHA

El ministro siguió en el ojo de la polémica cuando se informó que la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) por empresas de su familia en las que Eduardo aparecía como socio.

Incluso, el periodista Salvador García Soto dio detalles sobre supuestas transacciones irregulares de Medina Mora desde el extranjero.

En su columna Serpientes y Escaleras detalló que el Departamento del Tesoro de Estados Unidos y  la National Crime Agency del gobierno del Reino Unido detectaron movimientos a su favor por 2 millones 382 mil 526 libras en Londres y  2 millones 130 mil dólares en bancos estadunidenses.

Aunque Medina Mora calificó como falsos los señalamientos de García Soto, el presidente Andrés Manuel López Obrador confirmó que el ministro es investigado por transferencias bancarias irregulares.

“Hay información de Estados Unidos que fue entregada a Inteligencia Financiera. Eso no quiere decir que sea culpable. Hay que ver si no afecta el debido proceso. Es una información que tiene la oficina de Inteligencia Financiera, solicitada y aportada por el Gobierno de Estados Unidos”

Ahora, Eduardo Medina Mora tendrá que esperar a que el presidente acepte su renuncia, posteriormente, el propio López Obrador propondrá una terna al Senado de la República para nombrar al nuevo ministro de la SCJN.

rgg