Este día, la Junta de Directores y la Asamblea de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) aprobó la "Declaración de Salta sobre Principios de Libertad de Expresión en la Era Digital", con la que se llama a proteger el libre flujo informativo sin importar la plataforma por donde se propague.
Esta asamblea finalizó este lunes en la ciudad argentina de Salta (norte), ahí es donde la SIP emitió la declaración de 13 principios con un preámbulo en el que se destaca que el periodismo y los medios de comunicación son "actores vitales de la libertad de expresión, más allá de las plataformas en las que operan".
El documento considera que a pesar del "impacto positivo" de las tecnologías, las "amenazas y los ataques" a las libertades de expresión y de prensa, provenientes de actores estatales y privados, "no han cesado" y los "abusos y el mal uso" de estas tecnologías han potenciado la censura, la vigilancia o el acoso contra usuarios o periodistas.
Los derechos vinculados a las libertades de expresión y de prensa deben garantizarse por igual en el entorno digital y en el tradicional", reza el primer principio de la declaración.
También acordaron que las políticas públicas sobre internet deben estar dirigidas a garantizar que el espacio digital sea "abierto, neutral, accesible para todos y apegado a los derechos humanos" y subraya que los gobiernos no deben inhibir con regulaciones las expresiones de "interés público" ni imponer "sanciones agravadas" por ser manifestadas.
El bloqueo y filtrado de contenidos por control estatal en el espacio digital constituye censura previa de acuerdo a lo establecido en la Convención Americana de Derechos Humanos", según la declaración.
El encuentro de la SIP reunió durante cuatro días a representantes de los principales medios periodísticos de América.
Comenzó el viernes con la presentación de un borrador sobre la declaración finalmente consensuada hoy. El texto preliminar, que fue presentado por el presidente de la SIP, Gustavo Mohme, el expresidente de la entidad Danilo Arbilla, y el director ejecutivo, Ricardo Trotti, hace pie en la declaración de Chapultepec de 1994, que ya estableció diez principios sobre libertad de expresión y libertad de prensa.
Los Estados deben garantizar a quienes cumplen la función de informar un ambiente libre de violencia y amenazas en el espacio digital. Las agresiones deben ser investigadas con prontitud y sancionadas apropiadamente", añade el nuevo documento.
Hace hincapié en que las autoridades no deben utilizar mecanismos de "vigilancia digital para vulnerar las libertades y la privacidad de los ciudadanos", salvo en casos en que se persiga un "fin legítimo" acorde a lo establecido en las convenciones internacionales, mientras que la "vigilancia masiva no es aceptable en ningún caso".
Asimismo, las leyes deben garantizar el derecho a proteger la identidad de las fuentes confidenciales de los periodistas y respetar el derecho de las personas al anonimato.
La desinformación no se debe combatir con mecanismos de censura ni sanciones penales, sino con la adopción de políticas de alfabetización noticiosa y digital", agrega el texto.
Los actores del ecosistema digital deben lograr un balance adecuado entre la libertad de expresión, los derechos de autor y la propiedad intelectual, así como respecto a los beneficios que puedan generar los contenidos en dicho ecosistema", añade.
También se señala que los "intermediarios tecnológicos" deben comprometerse con el respeto y la promoción de la libertad de expresión y "no deben ceder ante presiones de gobiernos u otros grupos de poder".
Reafirmamos que la lucha por las libertades de expresión y de prensa es esencial para la democracia y el bien común: Defenderlas día a día es honrar nuestra historia y dominar nuestro destino", concluye la declaración.
La SIP, entidad privada sin ánimo de lucro dedicada a la defensa y promoción de la libertad de prensa y de expresión en las Américas, está integrada por editores y directivos de más de 1,300 medios de comunicación del continente americano y tiene sede en Miami.
MACRI, EN FAVOR DE LA LIBERTAD DE PRENSA
Al clausurar la 74 asamblea anual de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), el presidente de Argentina, Mauricio Macri, convocó hoy a defender la libertad de prensa y de expresión en América Latina.
El encuentro se realizó en Salta, una norteña provincia argentina, y en él que participaron medios de toda la región. Ahí, Macri aseguró que en este país “nunca ha habido tanta libertad de prensa” como la registrada durante su gobierno.
“En la Argentina de hoy cada persona puede decir libremente lo que quiere y piensa”, presumió, a pesar de que son constantes las investigaciones e incluso detenciones de usuarios de redes sociales que critican o amenazan a funcionarios, no así a quienes atacan a líderes de la oposición.
Haciendo referencia a la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, Macri aseguró que ahora no hay un gobierno generando “medios adictos y mucho menos presionando a periodistas para que difundan sus versiones”.
En ese sentido dijo que tampoco se gasta dinero púbico en propaganda política en los medios ni se invade a las audiencias “con eternas cadenas nacionales atacando a la gente que piensa distinto”, una crítica que se le solía hacer a la exmandataria.
Cabe mencionar que, actualmente en Argentina, las empresas periodísticas más importantes e influyentes son oficialistas y reciben la mayor parte de los millonarios recursos de la publicidad oficial.
El mandatario insistió en que durante su gobierno se permite que las voces opositoras tengan espacios en medios del Estado sin restricciones porque “una sociedad se desarrolla cuando la diferencia no se combate, ni se bloquea investigaciones periodísticas, sino que se colabora con ellas”.
Macri, la razón del desencanto del pueblo argentino
Por otra parte, destacó, también a diferencia del kirchnerismo, que ahora los funcionarios responden a los periodistas en conferencias en las que las preguntas no se eligen a dedo sino por sorteo para que no haya ningún tipo de censura.
Las declaraciones de Macri contrastan con la creciente precarización de la prensa, sufrida en este país desde que comenzó su gobierno, ya que en menos de tres años, alrededor de tres mil trabajadores de prensa perdieron su empleo, además de que cerraron decenas de medios.
Además, en junio de este año el gobierno despidió a 357 trabajadores de Télam, la agencia estatal de noticias, lo que dio inicio a un largo conflicto que todavía continúa, a pesar de que ya hay varios fallos judiciales que ordenan la reincorporación de los trabajadores.
mlmt