La calidad de sueño y la forma de dormir varía de un país a otro. Sin embargo, prevalece una constante en muchos países: no dormimos lo suficiente.
Mientras que algunos pueden funcionar con pocas horas de sueño, otros necesitan tomar café para obtener energía adicional.
El 62% de los adultos afirma que no sienten que descansan cuando duermen. Los expertos recomiendan tener buenos hábitos de sueño ya que la privación continua de este puede ocasionar condiciones de salud severas a largo plazo, como enfermedades cardíacas, sistema inmune débil, alta presión sanguínea, enfermedades del riñón, depresión, diabetes y obesidad.
La somnolencia es un factor determinante en cerca de 100 mil accidentes automovilísticos cada año, causando cerca de mil 500 muertes.
La persona promedio duerme durante 6.8 horas en un día a la semana, una cantidad menor a las 8 horas recomendadas.
"Los ladrones del sueño"
Las personas pueden sufrir de falta de sueño por diferentes circunstancias. Pero las más comunes pueden ser las siguientes seis:
1. Preocupación y estrés
El trabajo, la familia, la salud y las finanzas son algunas de las preocupaciones que afectan a personas de todos los ámbitos de la vida. Los adultos que viven en Canadá y Singapur tienden a ser los que más se preocupan.
2. Medio ambiente
El espacio físico donde duermes juega un papel importante en la calidad y duración del sueño. Casi el 35% de los adultos duermen en otro lugar que no es su cama. Curiosamente, los adultos chinos son los que duermen menos cómodos, mientras que los adultos japoneses son los que duermen más cómodos.
3. Horarios de trabajo y escuela
El ajetreo de las carreras universitarias y la gran carga de trabajo escolar tienen un impacto directo y duradero en los hábitos de sueño. Muchos dejan de a dormir para de completar las responsabilidades laborales, sociales y domésticas.
4. Entretenimiento
En la era de la tecnología, los ritmos naturales de la percepción diurna y nocturna se han desvanecido, especialmente por los efectos de la luz azul emitida por las pantallas de nuestros dispositivos.
5. Disruptores
Comer alimentos o beber alcohol o cafeína en las últimas horas antes de acostarse puede evitar que nuestros cerebros sepan que ya es hora de relajarse y prepararse para dormir. Los adultos que viven en los países desarrollados de China, Canadá, Estados Unidos y Singapur son los que más consumen cafeína.
6. Condiciones de salud
Más de tres cuartas partes de los adultos experimentan al menos una condición de salud que afecta el sueño. Estos incluyen insomnio, apnea del sueño, que afectan a aproximadamente 22 millones de personas solo en los Estados Unidos. Además de ronquidos, síndrome de piernas inquietas (RLS), narcolepsia y dolor crónico.
¿Cómo dormir mejor?
Pero no todo está perdido, las personas tienen alternativas para tener mejores hábitos para dormir. Una de ellas es mantener una rutina, dormir y despertar a la misma hora, incluyendo los fines de semana
La siguiente es hacer ejercicio para equilibrar los niveles de melatonina y cortisol. Acompañado de una alimentación equilibrada, evitando comidas abundantes, alcohol o cafeína en las últimas horas antes de dormir.
Asimismo, actividades como el yoga, el tai chi y la meditación tienen un impacto positivo en la mejora del sueño.
La comodidad también es un factor fundamental. Es ideal mantener la habitación fresca y oscura, tener un colchón de alta calidad y ropa de cama cómoda.
El siguiente gráfico está basado en las conclusiones de la Encuesta Global de Sueño de Philips 2019, respondida por más de 11 mil adultos en 12 países:
cmo