El gobierno de Grecia atendió a una denuncia realizada por la organización PETA y ordenó la prohibición a turistas con sobrepeso de montar burros en la isla de Santorini.
Santorini es un archipiélago que pertenece a Grecia y se ha convertido en un gran atractivo turístico a partir de la película Mamma Mia. Sus calles escalonadas son recorridas por turistas de países desarrollados, de preferencia sobre estos animales.
Los burros realizan varios viajes en un día, bajo el sol y con pocas posibilidades de beber agua.
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Es por eso que la organización Personas por el Trato Ético de los Animales (PETA, por sus siglas en inglés), alzó la voz contra los “jinetes obesos” que maltratan a los animales al montarlos.
Tras la denuncia, el gobierno decidió actuar e imponer que a los animales no se les debe de poner un peso de más de 100 kilos, o un peso que no supere en cinco veces el del animal.
El Ministerio de Desarrollo Rural y Alimentación de Grecia dictó que los dueños de los burros deben garantizar su cuidado. También dotarlos de comida y agua.
cmo