La reciente publicación de la columna ''''El mito del racismo sistemático de la policía'''', en el diario The Wall Street Journal creó un malestar entre los trabajadores del medio, especialmente entre los trabajadores de raza negra, el debate sobre impedir la difusión de contenidos considerados racistas a través de artículos de opinión se mezcla con la conversación sobre cómo hacer que los lectores distingan entre la información o la interpretación.
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Tras esta columna más de 280 empleados de Wall Street Journal firmaron una carta dirigida al editor del diario en el que le piden una diferenciación más evidente entre contenido informativo y artículos de opinión.
De acuerdo con los firmantes, “la falta de transparencia y de verificación de datos, así como el aparente desprecio por la evidencia” de todo lo que no sea información factual y comprobada “socava la confianza de nuestros lectores y nuestra capacidad de ganar credibilidad con las fuentes”.
En la carta, los trabajadores mencionan varios ejemplos, entre ellos la columna del vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence sobre el covid-19 que fue corregida con datos e indica que quienes leen el diario a menudo no distinguen qué es opinión y qué información.
Para ello, en la misiva se pide al medio un etiquetado más claro sobre el contenido publicado tanto en la web como en la app del periódico, así como una leyenda que aclare que “las páginas de opinión de Wall Street Journal son independientes de su redacción”, lo cual servirá para que los lectores distingan entre la opinión y la información.
El malestar entre los periodista llega en medio de un clima de tensiones que se registra al interior de varios medios en Estados Unidos por las posturas que representan las columnas publicadas esto tras la muerte de George Floyd a manos de la policía de Minnesota en mayo pasado.
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