El día de ayer se llevó a cabo una redada antiinmigrante en Mississippi, Estados Unidos, de la que resultaron detenidos más de 680 indocumentados, sin embargo los trabajadores de las fábricas donde se desplegó el operativo sabían que elementos de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE) acudirían a las plantas procesadoras de alimentos.
Aquí los puntos clave para comprender mejor esta redada en Misisipi:
LA VISIÓN DE ICE
En el operativo participaron cerca de 600 agentes de ICE, quienes realizaron “múltiples órdenes federales de búsqueda criminal en siete plantas de procesamiento agrícola en Mississippi”.
La redada -calificada como una “investigación criminal”- estuvo comandada por la Unidad de Investigaciones Especiales (HSI) del Departamento de Seguridad Nacional (DHS).
No obstante, los detenidos de ayer son trabajadores con varios años dentro de las plantas procesadoras de alimentos, además de que algunos de ellos tienen hijos que cuentan con la nacionalidad estadounidense.
Se trata del mayor número de migrantes detenidos desde que este tipo de operativos fueron anunciados por Donald Trump. Incluso, al demorarse el cumplimiento de la orden, se creía que no se implementarían, pues los centros de detención se encuentran saturados ante el éxodo centroamericano que busca ingresar a territorio estadounidense, además de que en las cortes existen cerca de 900 mil casos que tienen que ser desahogados por 424 jueces.
Adicionalmente a los arrestos, los agentes de ICE confiscaron los registros comerciales relacionados con la investigación penal federal en curso de algunos de los detenidos.
Se ha anunciado que los indocumentados con órdenes finales de deportación serán expulsados del país de las barras y las estrellas.
“Todos los extranjeros indocumentados arrestados están siendo entrevistados por el personal de ICE para registrar cualquier posible situación humanitaria atenuante”, apuntó la agencia. Y agregó: “Con base en estas entrevistas, y considerando su historial criminal y de inmigración anterior, se determinará caso por caso en función de la totalidad de las circunstancias de cada individuo detenido”.
SABÍAN DE LA REDADA
El pasado mes de mayo, el New York Times publicó sobre el envío de 570 mil cartas a empresas y empleadores por parte del gobierno. En el documento se advertía la no concordancia del número de seguridad social con la identidad de algunos trabajadores, y se mencionaban nombres y apellidos de los empleados en cuestión.
“No sabemos cuántos de los 680 trabajadores que se llevaron en la redada tenían documentos falsos o con otras identidades. Pero sabemos que en estas plantas todos deben tener papeles para trabajar”, expone Luis Espinoza, de la Alianza de Mississippi para los Derechos de los Inmigrantes (MIRA).
PADRES ALTERNABAN TURNOS EN FÁBRICAS
Al estar prevenidos, los migrantes llevaron a cabo algunas acciones ante un posible arresto y deportación.
En este sentido, algunos matrimonios alternaban sus turnos de trabajo con el fin de que sus hijos no se quedaron solos en casa. Por lo que Las mujeres trabajaban en el turno del día y los hombres en el turno de la noche. “Así, cuando llegara la migra, uno de ellos se quedaría en casa con los pequeños”.
Pese a ello, hubo familias que no se previeron, por lo que la redada de este miércoles dejó imágenes de niños llorando desconsoladamente, así como a gente gritando hacia los autobuses en los que fueron trasladados los detenidos, que no se llevasen a sus familiares y amigos.
Ante dicho escenario, organizaciones defensoras de los derechos de los migrantes ya recopilan información para asistir a las familias de los migrantes arrestados, pues con la detención muchas personas perdieron sus empleos, mismos que no podrán recuperar hasta regularizar su estadía en el país.
Pero “todos tienen pánico de salir a la calle. La redada terminó, pero los daños seguirán por mucho tiempo”, puntualizó Espinoza
De acuerdo con Bill Chandler, director ejecutivo de MIRA, los detenidos serán clasificados en Louisiana. Los que no cuenten con antecedentes criminales o migratorios “podrán salir libres con un grillete mientras continúan sus casos de deportación”.
MEXICANOS DEPORTADOS
El canciller Marcelo Ebrard, luego de reportar una cifra de ocho mexicanos detenidos, informó que autoridades migratorias estadounidenses aseguraron a 107 connacionales en distintas procesadoras de alimentos en Misisipi.
En rueda de prensa, el secretario de Relaciones Exteriores (SRE) explicó que se trata de connacionales que no pudieron comprobar su estancia legal en los Estados Unidos y que fueron detenidos durante los operativos.
El personal del consulado mexicano en Nueva Orleans, agregó Ebrard, atiende a los mexicanos e incluso ya desplegó dos brigadas de abogados para garantizar su legítima defensa y evitar violaciones a sus derechos humanos.
PIDEN ACTUAR AL CONGRESO
Luego del operativo de ICE, distintas organizaciones instaron al Congreso a actuar y limitar el desarrollo de redadas en el territorio estadounidense.
“Las comunidades de inmigrantes aún se están recuperando del ataque mortal en El Paso. Hoy, el gobierno de Trump alimentó el miedo y la ansiedad con los que vivimos a diario con una incursión masiva en el lugar de trabajo que resultó en la detención de 680 personas. Es cruel y no está a la altura de la América en la que creemos, una donde nuestras políticas tienen sus raíces en la dignidad y el respeto”, indicó el Movimiento de Reforma Migratoria Justa (FIRM)
La Coalición por los Derechos Humanos de los Inmigrantes de Los Angeles (CHIRLA) pidio se deje de financiar “la odiosa y racista agenda de aplicación de la ley de inmigración del gobierno de Trump”.
Con información de Univisión
djh