A menos de cuatro días de que se lleven a cabo los comicios en España, donde destaca la elección presidencial, que es buscada por el actual jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez por el PSOE, la derecha española, encarnada en Pablo Casado (PP), Albert Rivera (Cs) se ha enfrascado en una lucha por el espacio conservador del país ibérico.
En este sentido, durante la campaña electoral se ha referido, a manera de broma, que este domingo 28 de abril se efectuarán las “elecciones primarias de la derecha”.
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Prueba de ello son los discursos que ambos candidatos derechistas utilizaron durante el segundo y último debate antes de los comicios, cuyo fin era el de hacer ver al electorado cuál es la mejor opción para el sector conservador en España.
Por momentos, el pasado martes, los candidatos derechistas se enfrentaron cara a cara, mientras los líderes de la izquierda (Sánchez e Iglesias) fungían como testigos, a excepción de las veces en que Pablo Iglesias (Unidas Podemos) pidió respeto a sus contrincantes, sin aportar nada al calor de la discusión.
En adición, este miércoles se anunció el fichaje por parte del partido comandado en las boletas por Albert Rivera, de Ángel Garrido, quien recientemente dejó de ser presidente de la Comunidad de Madrid, dejando así al PP, partido de mayor votación en la capital española.
Este cambio representa un fortalecimiento para Cs, que en las últimas semanas de campaña ha dirigido sus esfuerzos en captar votos de la derecha.
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SÁNCHEZ, CON CAMINO LIBRE
Ante el enfrentamiento de la derecha española, Pedro Sánchez y el PSOE se dicen seguros de tener el camino libre hacia la victoria el próximo domingo, con una estrategia basada en postulados de estabilidad, moderación y alejamiento de la confrontación.
Luego de los debates de este lunes y martes, el partido de Pedro Sánchez advierte que contarán con una ventaja considerable respecto al segundo partido en los resultados finales.
Cabe destacar que dentro del PSOE, al principio de la carrera presidencial, que debían dirigirse a los españoles “progresistas”, aquellos que sitúan en el centro y en el centro izquierda.
Asimismo, es importante mencionar que los estudios de opinión señalan la existencia de casi seis millones de votantes indecisos. Según el PSOE, entre ellos y Cs se disputarían un grupo cercano a los 800 mil votos. Después de los debates, quieren creer que ese electorado no ve en Rivera una opción de centro.
Con información de El País
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