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Habrá "transición tranquila" a segundo mandato de Trump: Pompeo

El secretario de Estados de la Unión Americana, Mike Pompeo, es la voz de más alto rango que se ha pronunciado a favor de que Trump se mantendrá como presidente

Escrito en MUNDO el

WASHINGTON.- El secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, anunció que habrá una "transición tranquila" hacia un "segundo" mandato de Donald Trump.

Las declaraciones de Pompeo son las primeras que hace un funcionario del más alto rango del gobierno de Trump sobre el futuro de la administración tras las elecciones del pasado 3 de noviembre, y dan por descontado que la transición podría tornarse caótica.

TRUMP EMPIEZA A ASIMILAR QUE PERDIÓ; BUSCARÍA POSTULARSE EN 2024

Donald Trump, presidente de Estados Unidos que perdió las elecciones celebradas el pasado 3 de noviembre en el país de las barras y las estrellas, dijo a sus asesores, en un acto que expresaría su aceptación de los resultados que dan por ganador al demócrata Joe Biden, que piensa postularse para la carrera presidencial de 2024, de acuerdo con dos fuentes consultadas por Axios bullet. 

Desde la noche del pasado martes, luego de comenzar a publicarse los resultados preliminares en los que Biden aventajó sobre el republicano, Trump acusó, sin prueba alguna, un fraude para evitar lo que sería su segundo mandato al frente de EU.

Tono que guardó en los mensajes emitidos desde su cuenta de Twitter, así como durante su primera aparición pública luego de los comicios, el pasado jueves, en la que la mayoría de las televisoras estadounidenses decidieron interrumpir la transmisión de la conferencia del presidente para aclarar a los televidentes que dichas afirmaciones eran falsas. 

La familia Trump parece estar dividida sobre la aceptación de su derrota, dijeron medios locales, que ubican a su esposa, Melania Trump, y a su yerno y asesor, Jared Kushner, entre los que piden que claudique, mientras sus hijos mayores, Donald Jr. y Eric, se oponen.

Sin embargo, Jason Miller, asesor de la campaña de Trump, ha rechazado esas afirmaciones, informó este lunes la cadena CNN.

Expertos pronostican que la candidata demócrata a la presidencia en 2024, sería Kamala Harris -vicepresidenta electa-, en lugar de que Biden busque un segundo mandato de cuatro años.

UN TRUMP DESAFIANTE

Lo anterior, luego de la negativa de aceptar la derrota del presidente, Donald Trump, en las elecciones del pasadas martes, abriendo un escenario caótico en EU con el Departamento de Justicia respaldando las denuncias infundadas de fraude electoral, mientras sigue bloqueada la cooperación con el equipo de transición de Joe Biden.

Pues cuatro días después de que se proyectase a Biden, candidato demócrata, como próximo presidente de EU, Trump sigue parapetado bajo un muro de acusaciones sin evidencia.

"Estamos haciendo grandes progresos. Los resultados empezarán a llegar la próxima semana. Volvamos a hacer grande a EU", dijo Trump a primera hora de este martes desde su cuenta de Twitter sin ofrecer detalles al respecto.

Aunque en un principio los republicanos habían optado por el silencio, poco a poco los líderes del partido han ido ofreciendo un apoyo matizado a las denuncias del mandatario.

"El presidente está 100% en su derecho de investigar las acusaciones de irregularidades y sopesar sus acciones legales", aseguró Mitch McConnell, líder de la mayoría republicana en el Senado anoche durante una intervención en el Senado.

McConnell se abstuvo de reconocer las proyecciones de los medios que otorgan la victoria a Joe Biden en los comicios del pasado 3 de noviembre.

La actual situación supone un marcado contraste con lo ocurrido hace cuatro años, cuando Trump se impuso a la candidata demócrata, Hillary Clinton.

Apenas unos días después de conocerse el resultado en 2016, Trump era recibido en la Casa Blanca por el entonces presidente saliente Barack Obama (2009-2017), y arrancaba así el proceso de transmisión del poder.

Una escena que parece impensable ahora.

TENSIONES EN EL SENO DEL DEPARTAMENTO DE JUSTICIA

Ante la inusual situación, la agitación interna en las agencias federales es más que evidente.

Pocos minutos después de que el fiscal general de EU, William Barr, ordenase investigar el supuesto fraude en los comicios presidenciales, el director de delitos electorales del Departamento de Justicia, Richard Pilger, anunciaba su dimisión inmediata.

"Habiéndome familiarizado con la nueva norma y sus ramificaciones (...) lamentablemente debo renunciar a mi cargo como director de la División de Crímenes Electorales", anunció Pilger, en una comunicación interna filtrada a medios estadounidenses en la noche del lunes.

Pilger, además, lamentó que la orden de Barr "deroga una norma de 40 años de no interferencia (federal) en investigaciones de fraude electoral durante el periodo anterior al de certificación de las elecciones".

Barr había criticado, precisamente, el rol de la división de Pilger y había obligado a todos los fiscales del Departamento de Justicia a investigar supuestas irregularidades en las pasadas elecciones presidenciales antes de que los resultados sean definitivos.

TRANSICIÓN EN EL AIRE

La agencia gubernamental encargada de iniciar el proceso de transición es la Administración de Servicios Generales (GSA, en inglés), una vez que determina que hay un ganador "aparentemente exitoso" en las elecciones.

Algo que, por el momento, su directora, Emily Murphy, nombrada por Trump, no ha hecho.

Si bien Biden consideró oportuno dar unos días a la Administración Trump para que asimilase la derrota, poco a poco la campaña del presidente electo ve crecer su inquietud ante la postura beligerante del mandatario.

"Creemos que ya ha llegado el momento de que la directora de la GSA certifique con rapidez a Joe Biden y Kamala Harris como presidente y vicepresidenta electa", indicó un asesor de Biden en una llamada telefónica anoche.

Esta certificación es necesaria para que la mecánica de la transición comience a operar, al otorgar acceso a miembros del equipo del presidente electo a información gubernamental y que puedan establecer contacto con los funcionarios de las agencias federales.

Biden considera especialmente necesario este paso ante la gravedad de la crisis del coronavirus, que ha dejado en EU. más de 237,000 muertos.

La campaña del mandatario saliente, así como el Partido Republicano, han interpuesto más de una decena de demandas -algunas ya retiradas- en varios estados denunciando supuestas irregularidades, pero, aunque esos casos fuesen ciertos no parecen ser suficientes para revertir el resultado.

Para ganar las elecciones en los tribunales, Trump debería darle la vuelta al escrutinio en Pensilvania, Georgia y Nevada o Arizona, todos ellos estados en los que Biden ya ha sido declarado ganador o lidera el escrutinio de forma clara.

Según los últimos conteos, Biden cuenta con 290 votos en el colegio electoral, por encima de la cifra mágica de 270 que otorga la victoria.

(djh)