El tiroteo en El Paso, Texas dejó un saldo de 22 muertos, en su mayoría de origen latino, mexicanos incluso.
Sin embargo, los medios estadunidenses no hicieron énfasis sobre este hecho, que la masacre tenía un origen de odio, mismo que el tirador detenido, Patrick Crusius, ha confesado ante as autoridades.
Un artículo publicado por The Atlantic y escrito por Lulu García Navarro, expone esta realidad mediática en la que los latinos son borrados.
“Los titulares de nuestros periódicos más importantes y las noticias por cable omitieron o minimizaron la naturaleza histórica de la carnicería en El Paso”.
Esto, precisa el artículo, pese a la importancia de los latinos en el día a día de los Estados Unidos.
“Hemos luchado en todas las guerras americanas. Nuestra comida, nuestro idioma y nuestra cultura han dado forma a todos los aspectos de la vida estadounidense, desde hace siglos”
En contraste, los medios estadunidenses siguieron el llamado de unidad del presidente Donald Trump, quien desde su precampaña presidencial protagoniza un discurso de “deshumaniza y maltrata a los latinos”.
Pese a la masacre de El Paso, precisa García Navarro, siguió una campaña sostenida y deliberada de la administración Trump para demonizar a los inmigrantes.
El artículo critica la labor de los periodistas al respecto, quienes no contextualizan, ni informan esta segregación contra los migrantes.
Aunque se ha hablado abiertamente del tiroteo y de las víctimas, detalla la autora, la mayoría de los medios no eligieron enfatizar las razones del atentado.
Sin embargo, esta eliminación de los latinos por los medios estadunidense no es nada nuevo, desde quienes protagonizan las noticias, como los que la presentan, es decir, conductores y escritores.
“Los niños latinos son separados de sus padres en la frontera, y los crímenes de odio contra los latinos están en aumento. Los medios de comunicación tienen un papel importante en la elaboración de estas conversaciones”
La ausencia de latinos en las instituciones periodísticas deja un vacío que puede llenarse con "imágenes y retóricas falsas y negativas", precisa García Navarro.
“Durante años, hemos marginado las voces de los latinos en nuestra cobertura y en nuestras propias salas de redacción.”
A autora reconoce que en días posteriores al tiroteo en El Paso, más periodistas latinos están escribiendo y apareciendo en televisión, lo que califica como “un progreso”, mismo que tomó una masacre.