Dicen que cada vez que habla el obispo Edir Macedo la mitad de Brasil se paraliza. El hombre de 74 años es el pastor más rico del mundo, y no sólo tiene a Dios de su lado, también el aparato mediático más grande de su país.
En 1989 compró por 45 millones de dólares el canal Record, que transmite por radio y televisión, y su influencia en el país se quintuplicó junto con sus ingresos.
Imágenes de una de las mansiones del pastor Edir Macedo. (Especial)
Para 2017 el pastor recibió más de 1,200 millones de dólares producto no sólo de sus negocios sino de diezmos. Uno de sus sermones puede empezar con esta pregunta “¿Cuál es el mayor país del mundo, económicamente hablando?” la gente le responde: “No sabemos”. El obispo continúa: “Los Estados Unidos. ¿Saben por qué? Porque hace mucho tiempo —esto es historia, lo pueden buscar en internet—, la colonización fue hecha por hombres que creían en la palabra de Dios. Y donaban, por eso en el billete dice Confiamos en Dios”. Y le siguen creyendo a su promesa de multiplicar el diezmos que entregan los fieles a la iglesia y que debe ser el 10% de los ingresos.
A fines de los años 70 los cristianos evangélicos en Brasil eran una minoría, hasta pasar a ser por lo menos 42 millones, de los cuales 10 millones son de la Iglesia Universal del pastor Macedo.
La Iglesia Universal del Reino de Dios es muy conocida en el mundo por el programa televisivo “Pare de sufrir”, que se emite en 172 países.
Como sucede en otras partes de Latinoamérica, salen a la calle a votar. Su Iglesia Universal fue creada en 1977. Desde ese momento se expandió por todo el país. En Brasil tiene 7,000 templos y más de diez millones de fieles. Nada más en Bogotá, la iglesia de Macedo tiene 14 templos. Su poder ha sido vital para mover los dos últimos fenómenos políticos brasileños, Lula da Silva y Jair Bolsonaro. Sin embargo, su desmesurada fortuna le ha valido infinidad de críticas y cuestionamientos.
La relación con Jair Bolsonaro empezó a estrecharse mucho más después del pasado 28 de septiembre. Ese día, a semanas de la primera vuelta, las mujeres salieron a marchar contra el discurso misógino del candidato presidencial. Bolsonaro pidió audiencia a Macedo y lo convenció. Al otro día los 7,000 templos de la Iglesia Universal se reunieron para orar. En realidad lo que hicieron fue una cadena de odio contra el Partido de los Trabajadores de su rival Fernando Haddad. Los especialistas afirman que en ese momento la balanza de las elecciones quedó a favor de Bolsonaro.
Jair “Messías” Bolsonaro no siempre fue evangélico. Hace apenas 2 años el flamante presidente electo de Brasil dejó el catolicismo para bautizarse en la Iglesia Universal del Reino de Dios. Fue en mayo del 2016 cuando Bolsonaro se convierte al evangelismo y recibe el nombre de “Messías” en una ceremonia celebrada en el río Jordán, en el Estado de Israel, siendo su iniciador el pastor y líder del Partido Social Cristiano de Brasil, Everaldo Días Pereira.
El poder político de los evangélicos de Macedo es arrollador. Tienen hasta su propio partido, el PRB que puso al último alcalde de Río de Janeiro, Marcelo Crivella, sobrino del obispo Macedo.
El gigante suramericano está en una etapa inédita de la democracia con la irrupción de un nuevo actor, la iglesia evangélica, que ha llegado a conquistar el poder religioso, mediático y ahora el político, al más alto nivel.
JGM