A partir del próximo año el ayuntamiento de San Francisco, California cobrará 10 dólares a los turistas que circulen por la famosa Lombard Stree, una de las calles con más curvas cerradas del mundo, ocho curvas en sus 183 metros de longitud.
La medida planeada en enero es para minimizar la congestión y ha sido aprobada por la Junta de Supervisores de la ciudad, aunque este proyecto aún necesita la aprobación del Estado de California.
Lomard Stree es la principal atracción en San Francisco y cada año se calcula acuden cerca de dos millones de turistas a visitarla.
La medida está diseñada para rebajar el tráfico y la presión turística sobre los vecinos de la zona, ya que en la calle Lombard hay residencias a cada lado y desde ella se accede tanto a garajes como a viviendas.
Además de la congestión, los vecinos se quejan del ruido y de la falta de civismo de algunos de los turistas, que se suben a los tejados de las casas y orinan en los portales.
"Debemos implementar un sistema que permita disfrutar de la calle más sinuosa del mundo tanto a los residentes como a los visitantes", indicó el congresista demócrata de San Francisco Phil Ting, quien redactó la ley estatal en la Asamblea de California que ha permitido a la ciudad aprobar el peaje.
La tasa se cobrará únicamente a los vehículos que quieran circular por el tramo con más curvas de la calle Lombard, que también deberán hacer una reserva con anticipación.
Una vez se implemente la medida, la calle Lombard se unirá a otro ícono de San Francisco que también cobra a quienes quieren circular por él, el puente Golden Gate, que obliga a pagar 8 dólares por vehículo a quienes lo cruzan.
kach