Desde las primeras horas del sábado el gobierno de Estados Unidos se vio precisado a cerrar parcialmente sus operaciones.
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Alrededor de 800 mil empleados públicos fueron enviados a sus casas. Parques, museos, emisión de visas, actividades de Defensa y otros rubros estuvieron semiparalizados.
El llamado “shutdown” duró 60 horas y el gobierno operará normalmente a partir de este martes.
El viernes, ante el rechazo de Donald Trump de reducir la cantidad de 18 mil mdd para construir el muro, y retomar el tema de los “dreamers”, los demócratas bloquearon la ampliación del presupuesto.
Pero los demócratas concedieron este lunes en el Senado una nueva prórroga a los fondos federales. La votación, con 81 votos a favor y 18 en contra. De inmediato se votó en la Cámara de Representantes y este martes el gobierno comenzará a operar totalmente tras la firma de Trump por la noche.
El acuerdo entre republicanos y demócratas se sostiene en dos pilares: la prórroga de financiamiento hasta el 8 de febrero y la promesa republicana de tratar de alcanzar un acuerdo migratorio.
Desde hace nueve años, los presupuestos no logran la aprobación parlamentaria y esto obliga al Gobierno a acudir cíclicamente al Congreso a pedir una prórroga de fondos.
La realidad es que los demócratas no terminan de creer en la promesa de los republicanos de abordar el tema migratorio de manera seria. ¿Tres semanas serán suficientes?