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¿Bukele deberá cambiar su discurso ante el fenómeno migratorio?

Luego de la frase del presidente de El Salvador, Nayib Bukele: “Es nuestra culpa”, se sugiere que dichas palabras que le dieron la vuelta al mundo tomen otro sentido

Escrito en MUNDO el

Nayib Bukele, presidente de El Salvador declaró recientemente: “Es nuestra culpa”, en referencia a la migración de miles de salvadoreños hacia Estados Unidos y luego de la trágica muerte de Óscar y Valeria, padre e hija salvadoreños, por lo que ahora se sugiere que es el momento para que dicha frase que le dio la vuelta al mundo, retome otro sentido.

La frase de Bukele es meritoria al haber sido pronunciada en una región de migrantes, donde muchos políticos prefieren decir que todo está bien en sus países, que estos prosperan a ritmo galopante, incluso que no hay desplazamiento forzado.

También refleja una nueva posición sobre el tema migratorio, sin embargo, se trata de un discurso conveniente para la clase política antiinmigrante de Estados Unidos.

Por lo que la frase podría mejorar: “Es nuestra culpa, pero no solo nuestra culpa”.

Ya que hasta el momento, no hay ningún líder reciente en Centroamérica que, además de reconocer su culpa, exija con contundencia respeto para sus ciudadanos que migran y ponga su voz en beneficio de sus denuncias y su tragedia humanitaria. Bukele aún tiene una oportunidad de ser el primero en decir esto.

Pues aunque Bukele hizo algo muy poco habitual entre los mandatarios centroamericanos, en otro sentido es igual que el resto de los líderes del Triángulo del Norte y es que si hay algo que unifica el discurso de todos los presidentes de la región respecto a la migración es la incapacidad de criticar con contundencia las posturas antiinmigrantes de los gobiernos de Estados Unidos y México.

Sostener que los gobiernos centroamericanos no tienen parte de la culpa y que su corrupción no es factor clave en la migración es de cínicos o mentirosos, pero decir que Estados Unidos no tiene otra parte de la culpa y de la responsabilidad de mejorar estas sociedades es de miopes o cobardes.

Ante esto, si el presidente Bukele realmente quiere hacer un cambio de discurso ante el fenómeno de la migración deberá incluir esta última parte. Ha habido decenas de gobiernos centroamericanos que se disputan el primer lugar como el más genuflexo ante Estados Unidos, y eso no ha generado que el trato hacia los migrantes mejore. Es momento de completar el discurso Bukele.




MJP