Información relevante en torno al ataque terrorista de Manchester sigue circulando, es el caso del rotativo estadunidense The New York Times quien en una reciente publicación de fotos hecha pública por el medio pero tomadas por la policía británica que cataloga a la bomba como “la bomba que fue diseñada para hacer el mayor daño posible”.
El análisis inicial de la bomba, con base en elementos fotografiados y recolectados en la escena del crimen, no permite deducir la cantidad o el tipo de explosivo del que estaba compuesta la carga, sin embargo, hace pensar que se trataba de un dispositivo artesanal fabricado tras una “profunda reflexión y con cuidado”.
Las fotos hechas públicas por el diario estadunidense, no revela más que elementos que pudieron haber sido usados por el atacante para hacer la bomba que incluye diferentes elementos del explosivo, desde el detonador hasta una batería, pasando por fragmentos de una mochila azul y pedazos de metal y de tornillos.
Incluso menciona, NYT que hicieron consultas a personas especializadas en explosivos, que dijeron que la bomba era “potente, dotada de una carga ultrarápida, pero también que la metralla fue dispuesta con cuidado y metódicamente”.
Además menciona que era tal la fuerza de la bomba que pudo haber lanzado al atacante varios metros y evidentemente hace daño a un gran número de personas cercanas al lugar de los hechos.
La publicación insiste en el hecho de que la bomba tenía un detonador poco habitual, con un pequeño circuito impreso y no un simple interruptor, como suele ocurrir. Esto podría sugerir que había un retardador, o incluso un receptor para activarlo a distancia, o una combinación de ambos.
El dispositivo también contaba con una batería más potente que las usadas normalmente para este tipo de artefactos. Todas estas señales podrían ser indicio de que “el artificiero tenía dificultades para fabricar un detonador fiable”.
Británicos Furiosos
Las autoridades británicas están “furiosas” con Estados Unidos, después de que varios datos de la investigación del atentado que fueron compartidos con ese país fueran filtrados, incluyendo las fotos de la bomba utilizada.
La ministra de Interior británica, Amber Rudd, se quejó de que información compartida con el Departamento de Seguridad Interior de EU y con otras agencias de inteligencia fueron filtrados a la prensa estadounidense, incluso antes de que las autoridades en el Reino Unido decidieran divulgarlas. Poco después fue que el Times publicó las fotos de los restos de la bomba.
Incluso mencionaron que decidieron detener el flujo de información secreta a los Estados Unidos para evitar filtraciones en las investigaciones del atentado terrorista en Manchester.
Theresa May, Primera Ministra de Reino Unido, señaló que en la reunión que sostendrá este día con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump le extenderá su preocupación por las filtraciones, incluso le hará saber de la decisión de no compartir por el momento la información.
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