La campaña de Joe Biden anunció el martes una propuesta para transformar la industria energética de Estados Unidos, comprometiéndose a eliminar la contaminación de carbono de las centrales eléctricas para 2035 y gastar 2 billones para impulsar la economía de energía limpia.
De acuerdo con el Washington Post, el plan reduciría drásticamente la dependencia del país de los combustibles fósiles y en un plazo de 15 años establecería un estándar de electricidad 100 por ciento limpio, el proyecto más ambicioso que Biden haya propuesto anteriormente.
Es la última señal del intento de Biden de reflejar la energía liberal en su partido, así como una respuesta a los llamados a planes más radicales para levantar una economía que se espera que sienta el impacto de la pandemia de coronavirus durante años.
El presunto candidato presidencial demócrata propone mejorar 4 millones de edificios y climatizar 2 millones de hogares durante cuatro años, lo que estima crearía un millón de empleos.
Además, propietarios de automóviles recibirían reembolsos por cambiar sus autos viejos y menos eficientes por otros más nuevos que liberan menos contaminantes.
Muchas de las propuestas de Biden, que planea esbozar en un discurso el martes por la tarde en Wilmington, Delaware, se basan en las recomendaciones de un grupo de trabajo compuesto conjuntamente por aliados de Biden y el senador Bernie Sanders.
Esas recomendaciones incluyen planes para expandir drásticamente la energía solar y eólica, incluida la instalación de 500 millones de paneles solares y 60,000 turbinas eólicas.
VISIÓN CONTRARIA A TRUMP
Es probable que el plan de Biden desencadene un debate vigoroso con el presidente Trump, que tiene un enfoque muy diferente del sector energético y la política climática del país.
Trump, un firme defensor de los combustibles fósiles, ha intentado revertir las políticas de la administración de Obama destinadas a reducir las emisiones de dióxido de carbono y establecer nuevos estándares para los artículos del hogar, como las bombillas.
También ha minimizado la ciencia detrás del cambio climático, y en 2017 retiró a Estados Unidos del pacto climático de París.
Biden, al comprometerse el martes a lograr una electricidad 100 por ciento limpia para 2035, está adoptando un enfoque más directo que su entonces jefe, el presidente Barack Obama, para controlar las emisiones del sector eléctrico.
Biden quiere exigir directamente a las empresas de servicios eléctricos que obtengan más energía de fuentes más limpias para mejorar la eficiencia energética de sus sistemas o enfrentarán multas.
Esa política ha demostrado ser políticamente viable a nivel estatal. La mayoría de los estados, incluidos los conservadores como Montana, Iowa y Texas, han impuesto sus propios requisitos de energía renovable a los servicios públicos locales. Pero no existe un estándar a nivel federal.
Esta propuesta se da después de que Biden se enfrentó a la presión de los jóvenes activistas de izquierda y los principales grupos ambientalistas para hacer más para abordar lo que ven como una crisis generacional.
ACCIONES CONTRA EL CAMBIO CLIMÁTICO
Los principales objetivos de la propuesta de Biden es reconstruir la economía y combatir el cambio climático. Además, gran parte del gasto se destinaría a reparar puentes y carreteras y mejorar los sistemas de transporte público.
La propuesta de Biden dice que todos los autobuses construidos en Estados Unidos deberían emitir cero gases de efecto invernadero para 2030, y también apuntaría a convertir los 500,000 autobuses escolares del país, incluidos los que funcionan con combustible diesel, en cero emisiones.
Como Biden prometió anteriormente, también apuntaría a construir 500,000 estaciones de carga de vehículos eléctrico.
Para hacer frente a la contaminación por el calentamiento climático del sector del transporte, la mayor fuente de gases de efecto invernadero del país, Biden está respaldando un proyecto de ley del líder de la minoría del Senado Charles E. Schumer, que pagaría a las personas por el intercambio de automóviles que consumen gasolina por electricidad y otros vehículos de bajas emisiones.
La propuesta climática no entra en detalles sobre lo que sucedería en áreas del país que dependen en gran medida de la industria de los combustibles fósiles, aunque una parte del plan de Biden apunta a crear 250,000 empleos que conectan pozos de petróleo y gas natural abandonados y recuperan carbón abandonado, minas de roca dura y uranio.
Biden también está pidiendo la creación de un "cuerpo de conservación del clima", una idea que fue promovida durante la primaria demócrata por el gobernador Jay Inslee.
Biden también está pidiendo varias disposiciones de justicia ambiental, incluida una propuesta de que alrededor del 40 por ciento del dinero que quiere gastar en gastos de energía limpia iría a comunidades históricamente desfavorecidas.
"Nos enfrentamos a un conjunto histórico de crisis: una pandemia, una crisis económica y un racismo sistémico", dijo Biden, y agregó que la crisis climática es "la crisis más dramática de todas, toca cada una".
El cambio climático, dijo Biden, “es la amenaza existencial para la humanidad, y es real".
"Es real. Y es urgente, y el público se está dando cuenta de ello. Y puede ser la respuesta para sacarnos de esta situación económica en la que estamos ”, dijo el candidato quien afirmó que emitiría órdenes ejecutivas en su primer día en el cargo para rescindir las que Trump emitió para bloquear los esfuerzos de la administración de Obama para reducir las emisiones.