Estados Unidos continúa a la espera de los resultados clínicos de la vacuna de AstraZeneca en el país. Mientras tanto, decenas de millones de dosis son guardadas en sus instalaciones, informó el diario The New York Times.
Según funcionarios de la administración, varios oficiales de salud han sugerido enviar las dosis al extranjero, a países que ya aprobaron la vacuna y que la necesitan con urgencia. Otros se han negado e insisten en quedarse con las dosis.
La vacuna de AstraZeneca ha sido autorizada en más de 70 países, y la compañía ha pedido a Estados Unidos que preste algunas dosis a la Unión Europea, con la cual la farmacéutica tiene compromisos no cumplidos.
Otros funcionarios han pedido que las dosis se envíen a Brasil, uno de los países más afectados por la crisis.
Sin embargo, la administración de Biden se ha negado hasta el momento. También se ha rehusado a compartir dosis de la vacuna Johnson & Johnson con la Unión Europea, a pesar de peticiones de la farmacéutica.
The New York Times reporta que la negativa que ha habido hasta el momento tiene que ver con las promesas que ha hecho el presidente de vacunar a todos los adultos del país en los próximos meses.
"Si tenemos un excedente, vamos a compartirlo con el resto del mundo", dijo Biden el miércoles. "Vamos a empezar por asegurarnos de que los estadounidenses sean atendidos primero".
LA SEGURIDAD DE LA VACUNA ASTRAZENECA
Esta semana, la empresa se ha enfrentado a dudas sobre la seguridad y eficacia de su vacuna. Países europeos como Dinamarca, Noruega e Islandia suspendieron el uso de la vacuna tras informes sobre coágulos de sangre.
Sin embargo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) afirma que no existe ninguna relación causal entre la vacuna y afectaciones relacionadas con coágulos sanguíneos.
El mes pasado, se suspendió la administración de la vacuna AstraZeneca en Sudáfrica, luego de que un ensayo clínico puso en duda su eficacia para combatir la variante que ha surgido en el país.