BERLÍN.- La canciller alemana, Angela Merkel, apoya un nuevo cierre de la vida pública, de corta duración pero con normas de actuación unitarias para todo el país, informaron el miércoles fuentes de su gobierno.
Aunque hubo un descenso en la incidencia durante Semana Santa, el viceportavoz del gobierno, Ulrike Demmer, indicó que esto no es un factor fiable. Esto se debe a que menos pruebas se realizan durante las vacaciones.
El país, sin embargo, sí vio un incremento en el número de pacientes en unidades de cuidados intensivos.
La declaración de la portavoz de Merkel supone un apoyo a la propuesta del líder de su Unión Cristianodemócrata (CDU), Armin Laschet, a favor de un nuevo cierre de la vida pública en todo el país y mientras se avanza en la campaña de vacunación.
El lunes de la próxima semana, se llevará a cabo una reunión entre Merkel, Laschet y los líderes regionales, en donde deberán abordarse las medidas a adoptar frente a la pandemia.
Desde finales de del año pasado están cerrados los comercios no esenciales. A principios de enero se contempló una relajación de estas restricciones, pero luego ese proceso se frenó ante el nuevo repunte de contagios.
LA VACUNACIÓN EN ALEMANIA
Para el 5 de abril se había administrado al menos una dosis de una vacuna contra la covid al 12.7% de la población (10.5 millones de personas). El 5.5% (4.5 millones) ha sido completamente inmunizada.
Durante Semana Santa se aceleró la campaña de vacunación, ya que empezó a ofrecerse a todos los mayores de 60 años la fórmula de AstraZeneca, medida que sigue a la decisión de suspender su empleo en menores de 60 años por recomendación de los expertos.
El martes se incorporaron a la vacunación los primeros médicos de cabecera a la campaña. Participarán en la acción unas 35 mil consultas, aunque en su mayoría lo harán el lunes de la semana próxima. Hasta ahora, las vacunaciones se habían centralizado en 430 centros distribuidos por el país.
ACV