Robert Francis Prevost, quien este 8 de mayo se convirtió en el papa León XIV, seguirá el legado de Francisco para consolidar la iglesia católica que quería y que encontró resistencias de parte de obispos conservadores, y lo hará con la disciplina y tradición de Estado que le gusta ejercer a los de su congregación, los agustinos, pronosticó el experto en religiones, Elio Masferrer.
“Francisco abrió grandes espacios pero no los consolidó porque no tuvo tiempo, porque a muchos obispos los tenía en contra, por ejemplo, el episcopado mexicano o el norteamericano, que no estaban de acuerdo y boicoteaban todo lo que hacía. Debemos entender que, muy probablemente, este papa comience a apretarle las tuercas a los episcopados díscolos”, previó Ferrer, autor del libro “¿Es del César o es de Dios?”
La hoja de vida de Prevost, que incluye crecer en un barrio obrero de Chicago, en Estados Unidos, y encabezar la diócesis de Chiclayo, Perú, con fuertes problemas sociales, le ha dado pulso para sentir el mundo con un enfoque social, planteó por su parte el sociólogo y experto en religión, Felipe Gaytán, en entrevista con La Silla Rota.
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Eso hace prever que será un papa global, que tenderá puentes y continuará el legado de su antecesor, Francisco, pero de manera moderada, continuó el también profesor en la Universidad La Salle.
“Se mueve entre el norte y el sur, entre Roma y América. Es moderado, pero no significa que sea tibio. Sabe de política social de la iglesia, y aunque se formó como sacerdote de Chiclayo, por su edad no está formado en la Teología de la Liberación”, aclaró.
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Como parte de los retos del nuevo papa están no solo liderar una comunidad de casi mil 400 millones de fieles, sino asumir el pontificado en un momento complejo en medio de una crisis profunda, marcada por los abusos sexuales cometidos por miembros del clero, así como los prolongados silencios institucionales, reformas que no pudo concretar el papa Francisco, planteó la académica de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, Rosa Merlín.
“A pesar de estos avances en la transparencia impulsados por su predecesor, persisten estas demandas sociales y eclesiales de justicia efectiva y de mecanismos claros de rendición de cuentas. Esta credibilidad moral del nuevo pontífice va a depender de esta posición para enfrentar con decisión este legado oscuro, particularmente dado que proviene de un país donde estas problemáticas han sido objeto también de amplio escrutinio público”, indicó.
Su trayectoria
Masferrer destacó la amplia trayectoria del nuevo papa, que abarca una gran preparación académica, con trabajo pastoral y luego dirigir áreas importantes para El Vaticano y el papa Francisco.
Se refirió a su licenciatura en matemáticas, luego su maestría en teología y su doctorado en derecho canónico. Además de que se fue de misionero a Perú y está naturalizado peruano. Estuvo en Chiclayo, una diócesis importante de Perú con problemas sociales muy fuertes. Después, el papa Francisco lo llamó a El Vaticano para ponerlo en el proceso de selección de los obispos.
“Eso es ser algo así como el jefe de recursos humanos. Y además manejó parte del área de espionaje, de la inteligencia de El Vaticano, con un sistema de control y de chequeo bastante fuerte del personal que le proponían”, describió Masferrer.
No sólo estaba al frente de esa posición tan importante, sino que el papa Francisco colocó a Prevost al frente de la Comisión para América Latina.
“En esa perspectiva podemos decir que es alguien que va a seguir la línea de Francisco”.
Destaca también que pertenece a los agustinos, a quienes se conoce por tener gran disciplina al interior de la orden, lo que hace al nuevo papa un hombre acostumbrado a mandar y obedecer, porque también fue superior en su congregación.
“Los agustinos tienen una larga tradición de disciplina y de Estado. De alguna manera San Agustín (fundador de la congregación) es el teórico de la construcción de la iglesia después del imperio romano”, puntualizó Masferrer.
Más que estadounidense, es global
Aunque en los titulares de diversos medios de comunicación o en redes sociales se destacó la nacionalidad estadounidense del nuevo papa, Gaytán ve a León XIV como un papa global, precisamente por su origen y sus preocupaciones que incluyen a los migrantes.
“Sí nació en Estados Unidos, pero es de padres migrantes, italiano y español. Por eso su apellido Martínez. Pero aparte de eso se fue a Perú y ahí hizo prácticamente su carrera como sacerdote y llegó a ser obispo de Chiclayo. Un papa que se mueve, no lo podemos encasillar como estadounidense en estricto sentido. Y aparte se mueve entre el norte y el sur, entre Europa y Estados Unidos, entre Roma y América Latina”.
El nombre que eligió no es casual
El nombre elegido por Prevost, de León XIV, no es casual, coincidieron en señalar los expertos consultados por La Silla Rota.
Elegir León XIV significó buscar una continuidad de la doctrina social que en su momento siguió León XIII en el siglo 19, luego de suceder a Pío IX, quien se había lanzado a una guerra contra la modernidad, como si buscara volver a la Era de Piedra, recordó Masferrer.
“Entonces, evidentemente va a ir sobre lo social y eso fue muy claro cuando dijo la iglesia es para todos y la paz, etcétera, se trata de un mensaje de reconciliación”, explicó el experto en antropología de las religiones.
Lo que puede ocurrir con su papado es que se pondrá más énfasis en reorganizar a la iglesia que en continuar con las encíclicas firmadas por Francisco, “Fratelli tutti” (“Hermanos todos”) y “Laudato sí” (“Alabado seas”) , sobre lo social y lo ecológico, respectivamente.
Elegir el nombre de León XIV forma parte de la idea de cambiar o adecuar a la iglesia al mundo moderno y contemporáneo, pero sobre todo tendiendo puentes, dijo por su parte Gaytán.
“Él sabe que está en una crisis social, no solamente de la iglesia, sino a nivel global, donde la iglesia tiene una voz importante. La elección del propio nombre te dice que tiene una agenda particular, el tema de las desigualdades sociales que lo ha vivido, porque él viene de un barrio obrero de Chicago y lo vivió en Chiclayo y conoce las problemáticas del mundo porque fue prefecto del dicasterio (en la curia romana) para los obispos”.
No abrirá temas polémicos
Parte de la moderación de León XIV será dejar temas que el papa Francisco abordó de la misma manera, como el de las relaciones entre personas del mismo sexo, que seguirá inamovible, sin que las reconozca la iglesia, opinó Elio Masferrer.
“Estoy convencido sí que le va a dar más lugar a las mujeres y no descartaría que siga abriendo el espacio para sacerdotes casados, para los divorciados no creo que sea ningún problema. Lo del matrimonio entre personas del mismo sexo, descuéntelo. No va a satanizar a los gays, pero tampoco los va a reivindicar”, es la previsión de Masferrer.
El nuevo papa no abordará temas polémicos en lo inmediato, aunque en los temas de justicia social avanzará más rápido porque es lo que más le interesa, coincidió por su parte Gaytán.
También trabajará en esto que se ha señalado a la institución, lo del relativismo moral en la iglesia.
Al respecto se le preguntó a Gaytán sobre los señalamientos de que Prevost encubrió abusos sexuales en Perú.
Era un tema del que no se sabía y emergió en cuanto fue nombrado. Es cierto que ha habido abusos documentados en Perú, cometidos por el cardenal peruano Juan Luis Cipriani desde los años 80, cuyo caso fue cubierto por décadas, pero el acusado fue destituido por Francisco en 2019.
Entonces quizá Prevost más que encubrirlo, tuvo las manos atadas mucho tiempo, consideró Gaytán.
Pero también destacó la pertinencia con que salió la acusación, precisamente el día que fue nombrado papa, por lo que ve que la acusación forma parte de una guerra sucia pre-cónclave, que le hicieron a todos los candidatos fuertes, como ocurrió en 2013 con Jorge Bergoglio, quien a la postre se convirtió en el papa Francisco, que en cuanto fue elegido se le acusó de haber estado cerca de la dictadura militar argentina.
El tema del presunto encubrimiento pegará a León XIV, pero durante su nombramiento como obispo no habían aparecido esos señalamientos, precisó Gaytán.
“Hasta ahora salen. Eso es más un golpeteo político de los hombres menos cercanos de Dios. Es parte de la política vaticana, la más sucia dentro del cónclave, del club de fans de los cardenales que estaban en disputa y que empezaron a golpear en las redes digitales”, dijo el analista de El Colegio de México.
Similitudes y diferencias
Aunque habrá una continuidad del legado del papa Francisco, por parte de León XIV, hay algunas diferencias, señaló Rosa Merlín.
Ambos tienen una preferencia por los pobres, los migrantes y los marginados, con vocación misionera y apertura al diálogo, pero mientras Francisco hizo gestos visibles y discursos globales, como las encíclicas, León XIV tiene una expresión espiritual más silenciosa.
“Francisco hablaba de una iglesia que tenía que acercarse a los más pobres y parece que León parece concebir como una iglesia que va a despertar estas conciencias donde el silencio orante. La fidelidad del Evangelio es fundamental y esta apertura al diálogo parece que León tiene un perfil mucho más reservado, aunque busca abrir puentes y unir al sur global con el norte global”.
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Otra diferencia es que Francisco fue un papa carismático, comunicativo, cercano a los medios, incluso disruptivo, mientras que León XIV tiene un estilo pastoral más discreto, centrado en la liturgia, en el silencio, en la oración y el respeto por la tradición, concluyó.