Ante la preocupación creciente de padres de familia, investigadores y expertos sobre el uso de redes sociales por parte de adolescentes, se ha recomendado limitar el acceso de los menores de edad a estas plataformas web en Estados Unidos, de acuerdo con lo publicado este miércoles por el doctor Vivek Murthy, cirujano general del Departamento de Salud del gabinete del presidente Joe Biden.
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La preocupación gira en torno al impacto que puede tener el mundo digital en la salud mental de los jóvenes. “Nuestros niños y adolescentes no tienen el lujo de esperar hasta que sepamos la huella que estas (las redes sociales) tienen en ellos”, afirmó la principal autoridad sanitaria en Estados Unidos, de acuerdo con información de El País.
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Las redes sociales, explica el experto, están diseñadas y son utilizadas para enganchar a los más jóvenes, lo que puede afectar a su desarrollo cerebral, en especial el de los adolescentes. El daño de las redes sociales depende del tiempo de exposición y señala que los problemas comienzan cuando se promedian más de 3 horas diarias de uso de estas plataformas.
El 95% de la población estadounidense entre los 13 y los 17 años dice emplear estas páginas y también encuentra beneficios en ellas. Entre las ventajas señalados por los adolescentes están el sentirse más aceptados, que son el mejor canal para encontrar ayuda en momentos difíciles y un buen lugar par exponer los lados más creativos.
Los daños de las redes sociales en adolescentes
El uso por más de 3 horas diarias, no obstante, duplica el riesgo de padecer ansiedad y depresión, así como desórdenes alimenticios, complejos sociales y la reducción de la autoestima, especialmente entre las niñas (un tercio de las mujeres entre 11 y 15 años han dicho sentir adicción por alguna red social).
El funcionario asegura que es responsabilidad del Gobierno dar herramientas para navegar las aguas pantanosas del ecosistema digital, ya que las tecnológicas no hacen lo suficiente para construir espacios seguros para niños y adolescentes, por lo que se pregunta por qué las autoridades no toman medidas con la misma seriedad para los nuevos juguetes o medicinas.
Una de las preocupaciones específicas de los padres y madres de familia es el cyberbulling y admiten que cada vez es más complejo guiar a los menores en un mundo con fácil acceso a la tecnología y consideran la crianza como una tarea más difícil que hace 20 años.
Una encuesta realizada en 2021 reveló que 8 de cada 10 padres de familia también consideran que las tecnológicas deben hacer más para proteger a los menores de contenidos inapropiados; mientras el 64% de los adolescentes aseguran haber estado expuestos a contenidos de odio en las redes sociales.
¿Cuáles pueden ser las soluciones?
- Las compañías dueñas de las plataformas digitales ser transparentes y compartir los hallazgos de sus investigaciones con expertos independientes y con el público, además de establecer un mínimo de edad para el uso de las plataformas y priorizar la salud mental y la seguridad en el diseño y desarrollo de los productos y servicios, de acuerdo con el documento de Vivek Murthy.
- Legisladores y expertos consideran que se debe tomar como guía la norma que tienen algunas redes sociales que establecen los 13 años como la edad mínima para abrir una cuenta, tomando en cuenta el dato que 40 porciento de los niños entre 8 y 12 años en Estados Unidos utilizan redes sociales. También existe la opinión de que la edad mínima debería ser de 16 años.
- A las cúpulas empresariales se les recomienda establecer comités de científicos y especialistas que puedan aconsejar cómo crear espacios seguros para los menores mientras estén conectados a las redes sociales.
- A los padres de familia se les aconseja tener un plan que establezca límites y reglas sobre el uso de plataformas digitales y que además se priorice la protección de datos personales.
- El funcionario sanitario aconsejó cortar la utilización de móviles, tabletas y computadoras al menos una hora antes de dormir, ya que estos electrónicos “interfieren con el sueño”.
- Se resaltó la necesidad de educar a los menores en los pasos que han de seguir en caso de que sean víctimas de cyberbullying y de abuso por correo, mensajes de texto, juegos en línea o redes sociales o si son contactados por algún adulto que les haya solicitado desnudos o fotografías explícitas.