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Mario, el niño que viaja solo en la Caravana Migrante

Asediado por las pandillas, el menor se salió de su casa sin permiso de sus padres; hoy está en la frontera de México y Guatemala esperando seguir hasta EU

Escrito en MUNDO el

Entre los miles de migrantes hondureños que forman parte de la Caravana Migrante destaca uno, se trata de Mario Castellanos, un niño de 12 años.

Salió desde el sábado pasado de San Pedro Sula, en Honduras, para cruzar Guatemala, México y finalmente Estados Unidos.

Sin embargo, su paso se detuvo en los límites de Guatemala y México, se quedó en el puente fronterizo junto con los integrantes de la Caravana Migrante.

Al verse varado intentó tirarse al rio como varios hondureños más que lo hicieron, pero no lo hizo, un elemento de la Policía Federal lo tomó por el cuello y lo tiró al suelo.

Las agresiones del uniformado le dejaron un golpe en el hombro y un raspón, sin mencionar las afectaciones que le dejaron los gases lacrimógenos que lanzaron las autoridades mexicanas.

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Mario Castellano fue entrevistado por la BBC, a quienes les contó que ya no asistía a la escuela y que vendía chicles para llevar algo de dinero a casa.

"Me querían meter a una pandilla […] Me decían que me metiera, que me iban a pagar bien, pero yo no quería"

Dilsia Murillo, madre de Mario, también contactada por la BB, asegura que el menor se fue sin permiso a la Caravana Migrante.

Mario le dijo a ella y a su padre que iba para el centro y regresaría en la tarde. No regresó.

"Unas amigas me avisaron, me llamaron por teléfono y me dijeron que lo habían visto por la tele […] Mejor no me estén enseñando eso que me voy a quebrar la cabeza"

El 15 de octubre habló con él, dice que lo extraña, pero si puede llegar a Estados Unidos es mejor a que se quede en Honduras.

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Salió sin nada, pero le gente ha sido buena con él, menciona que le han regalado ropa y comida.

"Cada vez que me quiero regresar me echan para adelante", relata Mario, quien ya es conocido por toda la caravana.

"En nombre de Dios, sé que Dios nos va a ayudar a pasar"

Mario sería uno de los 640 hondureños que, según el Instituto Nacional de Migración (INM), pidieron asilo en México.

Tanto para Mario como para toda la Caravana Migrantes, el futuro y su llegada a tierras estadunidenses es toda una incertidumbre.