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Tras el sismo, salen irregularidades en inmuebles dañados

Algunos de los edificios fueron construidos sin permisos, otros presentaron quejas antes del sismo y no se hizo nada al respecto

Escrito en METRÓPOLI el

Luego de que el sismo del pasado martes 19 de septiembre derrumbara 38 edificios y dejara con daños a 8 mil 30 inmuebles tan sólo en la Ciudad de México, van surgiendo irregularidades en las construcciones.

Un caso es la edificación de nueve pisos y un helipuerto en la calle de Nuevo León 238, en la colonia Hipódromo, de la delegación Cuauhtémoc.

Este inmueble provocó daños estructurales en dos edificios habitacionales que están a los lados y cuyas familias tuvieron que abandonar sus viviendas ante el riesgo de que se desplome.

Sobre ello, Rafael Guarneros, presidente del Comité Fundacional de la Asociación de Vecinos de la colonia Hipódromo, dijo que en dicha colonia hay cuando menos 26 inmuebles que fueron construidos con irregularidades, entre ellos, el de Nuevo León 238.

Guarneros detalló que a principios de año se presentó ante la delegación y el gobierno capitalino la solicitud por parte de los vecinos para que el inmueble se demoliera por el riesgo que representaba, pues aseguran se violó el reglamento de construcción.

 

El helipuerto, precisa Rafael, se construyó en una zona que está prohibida por el Programa Parcial de Desarrollo Urbano de la delegación.

Además, cuando se hizo la investigación, resultó que no tenía manifestación de obra de la demarcación, no tenía permiso de Aeronáutica Civil ni de uso de suelo expedido por la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (Seduvi) capitalina.

El arquitecto José Ávila Méndez, investigador en la Facultad de Arquitectura de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y también miembro del Comité Asesor de Seguridad Estructural del GCDMX, observó que las columnas son pequeñas en comparación con la carga que tiene el edificio, “por lo que hasta sin sismo se puede caer”.

El caso más sonado ha sido el del colegio Enrique Rébsamen, en Villa Coapa, en la demarcación Tlalpan.

En el inmueble que colapsó se construyó un departamento donde vivía la dueña y directora del colegio.

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Esta construcción se habría hecho sin los permisos correspondientes, por ello el derrumbe de ese inmueble y no del otro edificio que formaba parte del colegio y que tenía más de 30 años de construido.

El saldo por el derrumbe en el Colegio Enrique Rébsamen es de 19 niños muertos y ocho adultos.

Un caso más es el de Uxmal 443 colonia Narvarte, en la delegación Benito Juárez.

Rocío Arregui, propietaria del departamento 301 denunció: “nos defraudaron con el crédito hipotecario. Aunque hay un seguro, para qué vamos a reconstruir si en cualquier otro sismo se puede caer”.

Para iniciar una edificación en la capital se tiene que expedir una manifestación de construcción, la cual se realiza en la Ventanilla Única de cada delegación.

También se debe contar con el permiso de uso de suelo que emite la Seduvi, así como los impactos urbanos que causará la obra y el visto bueno del Director Responsable de Obra (DRO).

En casos especiales se requiere permisos de la Secretaría de Medio Ambiente (Sedema), cuando la construcción se hace sobre zona de conservación.

Las instancias a las que les compete sancionar y cerrar las obras que no cumplan requisitos son el Instituto de Verificación Administrativa (Invea), las delegaciones, la Seduvi y la Sedema.


Con información de El Financiero