Como parte de la logística y estrategia que los presuntos sicarios del cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) implementaron para tratar de asesinar al secretario de Seguridad Ciudadana (SSC) Omar García Harfuch, los delincuentes colocaron placas apócrifas en los vehículos que utilizaron para perpetrar la agresión, la cual ocurrió en calles de Lomas de Chapultepec, el viernes pasado.
De acuerdo a los avances de la investigación, en el lugar de los hechos fueron captados por cámaras del C5 por lo menos seis automotores. En las imágenes se alcanzaron a apreciar las matrículas de los vehículos; sin embargo, al tratar de verificar la información de las placas resultó que éstas eran apócrifas.
En total, los elementos de la Fiscalía General de Justicia (FGJ) de la Ciudad de México aseguraron seis automóviles que están vinculados con el atentado. De todos éstos las matrículas era apócrifas, según informaron fuentes de la institución a La Silla Rota.
Aunado a esto, en las movilizaciones que realizaron las autoridades después del atentado, se localizaron cajas de documentos en los inmuebles que fueron cateados, donde además se ubicó a José Armando “El Vaca”, presunto autor intelectual del intento de asesinato del jefe de la Policía capitalina.
En los lotes de papeles, los elementos de la SSC y de la FGJ localizaron documentos falsos como tarjetas de circulación, licencias y machotes de placas para automóviles. Dicho material falso formó parte de la estrategia que los agresores orquestaron y planificaron por semanas para asesinar a Omar García Harfuch.
No obstante, a pesar de la elaborada logística que utilizaron los sicarios, las autoridades capitalinas lograron ubicar los vehículos que se utilizaron en el atentado y detener a 12 sujetos en la escena del crimen, donde tres personas perdieron la vida y cinco más resultaron lesionadas.
CÉLULAS CRIMINALES LOCALES PARTICIPARON EN ATENTADO
Una de las líneas de investigación que persiguen los detectives encargados de esclarecer la agresión al titular de la SSC, es que el cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) formó alianzas con células criminales que operan en la Ciudad de México, para ejecutar el "golpe".
Los lazos que formó el CJNG para poder tener presencia en la capital y así lograr ingresar el arsenal con el que atentó contra el jefe de la Policía, fue con integrantes de la Unión de Tepito, del Cártel de Tláhuac y con un grupo de recién formación asentado en la alcaldía Gustavo A. Madero, identificado como ACME.
Para consumar las alianzas, los integrantes del Cártel Jalisco habrían otorgado grandes cantidades de dinero a sus aliados, además de la promesa de iniciar negocios ilícitos y una expansión de la distribución de droga en la zona Metropolitana, de acuerdo con personas cercanas las pesquisas.
cmo