A un día que terminara la gestión del gobierno capitalino, encabezado por Miguel Ángel Mancera y José Ramón Amieva, los capitalinos perciben que el servicio del Sistema de Transporte Colectivo se deterioró en estos seis años, aún con el incremento de la tarifa que a su consideración no mejoró la calidad.
LEE MÁS: Metro de CDMX, el ''''coco'''' de Mancera y la estrategia de Sheinbaum
José Mendoza usa el Metro entre cinco o seis veces al día por cuestiones de trabajo. En fechas recientes ha observado que el servicio se ha deteriorado. Ha padecido hasta una hora el retraso de trenes.
El servicio es pésimo. Falta mucha organización y esos famosos cambios del aumento de precio no benefició en nada (…) los retrasos en los trenes afectan a todos. Por ejemplo si tengo una cita a las 9:00 de la mañana, tengo que salir antes, en una distancia que normal sin tráfico me hago 20 minutos, a veces tengo que salir hasta una y media para poder llegar a tiempo.
Antes, comenta que dentro del Metro había más respeto y estaba más limpio. Indicó que para mejorar el servicio, debe ser un trabajo de todos, incluyendo a los usuarios. “Falta mucha cultura de la gente, que muchas veces no sabe usarlo o comportarse”.
En 2013, durante este sexenio en la Ciudad de México que ya casi concluye, se incrementó la tarifa del Metro de 3 a 5 pesos con la promesa de mejorar el servicio a través de 11 compromisos. Sin embargo a cuatro años de modificar el costo del boleto solo se han cumplido el 20 por ciento y la percepción en los usuarios es que esa medida fue un fracaso.
Armando Rosette utiliza el Metro de lunes a sábado. Es uno de los 5.5 millones de personas que viaja diario en el Sistema de Transporte Colectivo (STC). Es abogado litigante. Dice que últimamente padece cada vez más los retrasos en los trenes y las aglomeraciones.
A cuatro meses del aumento de la tarifa, señala que no ha visto reflejada esa medida en el servicio, pues para él sigue igual.
Siguen con los mismos problemas de los vendedores ambulantes, de la basura, de la tardanza. Hay mucha gente y los trenes son insuficientes. La verdad no noto ningún cambio que nos haya beneficiado a los usuarios.
Comenta que por su trabajo las líneas que más utiliza son la 1, 2, 9, 3 y estaciones como Niños Héroes, San Lázaro, Miguel ángel de Quevedo. Y de ellas donde padece más problemas en el servicio es la que va de Pantitlán a Observatorio, que es la 1 y la de Universidad a Indios Verdes.
También, Jimena González, quien se transporta en Metro diario a su trabajo, percibe que el servicio sigue igual, no ha mejorado sobre todo en los últimos años.
La tarifa si está un poco cara, porque a comparación de años pasados, gastar 5 pesos afecta más en el bolsillo. A la semana ya es un gasto bastante considerable. El servicio y la seguridad son muy malos.
Agrega que casi diario padece de los retrasos de los trenes, lo que ocasiona que llegue tarde a su trabajo.
Ayer, un tren se quedó parado como 20 minutos entre estaciones. No sé qué pasó y tardó mucho en avanzar. Para mi consideración la línea rosa es la más lenta.
Lo que debe de mejorar en el STC: especialista
Víctor Alvarado, coordinador de movilidad y cambio climático de la asociación El Poder del Consumidor, explica que uno de los principales elementos o criterios en la percepción del usuario con respecto al servicio del Metro es la pérdida de tiempo en horas pico, ya que tiene que esperar de tres a cinco trenes para poder abordar.
Eso tiene una gran afectación en su calidad de vida, pero sobre todo en su productividad y competitividad, ya que se ve mermado la capacidad de desarrollarse en su empleo o escuela por esta pérdida de tiempo. Le tiene que destinar de su tiempo cerca de un 30 o 40 por ciento más de lo habitual.
Bajo las condiciones en las que opera el Metro, el número de usuarios ha rebasado la capacidad que tiene el sistema y esto se debe, en gran medida a la omisión de asignación de recursos, de invertir más dinero y generar soluciones para eficientar su operación.
En ese sentido se suele cuestionar si el aumento a la tarifa tuvo que tener una mayor significancia en la operación. La realidad es que son otros elementos que acompañan esta parte. Es decir, los problemas del STC no solo se resuelven con el aumento a la tarifa. Hay que recordar que el costo del boleto está subsidiado y que la realidad es que tendríamos que pagar más de 12 pesos por este servicio.
Dice que lo que se tiene que hacer para administrar de manera correcta al Sistema de Transporte Colectivo es otorgarle mayores recursos para ampliar su capacidad y red para poder llegar a lados. Agrego que ello debería de estar acompañado de una planeación de la ciudad.
Es una serie de estrategias que se tienen que implementar para lograr ver un sistema de transporte eficiente. Lo que sí es una realidad es que el aumento de la tarifa quedó rebasado en cuanto a las expectativas que el usuario se pudo haber generado.
El especialista en movilidad menciona que el aumento al costo del boleto en 2013 se reflejó de manera positiva mediante el arreglo cosmético del mobiliario como la modernización de estaciones o cambio en las escaleras eléctricas. Sin embargo, no en la operación.
El integrante de El Poder del Consumidor indica que para el próximo gobierno de la ciudad y administración del STC el reto es conseguir una mayor asignación de recursos federales para poder atender los problemas operativos de los que hoy adolece o padece.
El aumento de dos pesos como tal desde la experiencia u observancia del usuario podría interpretarse como un fracaso de este gobierno, se sigue perdiendo el mismo tiempo, de hecho se tiene la percepción de que los tiempos para poder abordar son mayores. También el usuario tiene que hacerse corresponsable con sus actos, pero para ello las autoridades tienen que generar estrategias de socialización y sensibilización para que se esto sea ordenado y la operación pueda ser funcional realmente.
“Necesitamos más presupuesto”
En tanto, Jorge Jiménez Alcaraz, director general del STC, apunta que el Metro tiene muchos problemas que forzosamente requieren de una inversión relevante.
El Metro dejará (al próximo gobierno) una propuesta como proyecto de presupuesto por un rango de 43 mil millones. Normalmente en esas órdenes están las necesidades más apremiantes del organismo que contemplaría la reposición de activos. El modernizar sistemas, instalaciones fijas, escaleras, mantenimiento de trenes.
Agregó que en los últimos años el STC ha recibido un recorte presupuestal que ha ocasionado no se puedan realizar diversos programas de modernización o compra de trenes, por lo que han tenido que enfocar los recursos a un mantenimiento correctivo en lugar del preventivo.
Hay muchos problemas que necesitan una inversión relevante. Sabemos que es un proyecto de POA muy alto. Normalmente los rangos reales cuando dan los techos presupuestales cada año. Hemos andado en rangos de 17 mil y 18 mil millones de pesos.
vmff