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¿Por qué no se disipa la contaminación?

Un atípico sistema de alta presión se localiza a 5,910 metros de altura evitando la dispersión de contaminantes, explica la CAMe

Escrito en METRÓPOLI el

“La semana no pinta bien”, lanzó el coordinador ejecutivo de la Comisión Ambiental de la Megalópolis (CAMe), Martín Gutiérrez Lacayo, al comentar que un atípico sistema de alta presión se localiza a 5,910 metros de altura, evitando la dispersión de contaminantes.

En entrevista en Despierta con Loret, el funcionario comentó que aunque llueva mucho en la noche, el sistema de alta presión no permite que corra el viento durante el día, por lo que se reduce el impacto en la emergencia por ozono que se forma “cuando sale el sol y su nivel de radiación es alto, entre la una y las cinco y media de la tarde”.

Gutiérrez Lacayo apuntó que hay dos fenómenos que envuelven a la megalópolis y generan contaminación: al amanecer se presenta el de inversión térmica, “como llovió, las partículas quedan atrapadas entre las temperaturas frías y el calor de los rayos del sol; a partir de las 12 del día, se dispersa la bruma”, y es en ese momento que se genera la formación de ozono.

Detalló que de seguirse alargando la contingencia, se realizará una reunión extraordinaria para poder determinar una acción extra, aunque señaló que esto es poco probable.

El titular de la CAMe agregó que estos fenómenos meteorológicos están en constante cambio, por lo que se “hacen tres evaluaciones al día para ver cómo se dan las circunstancias”.

Descartó que se decrete una suspensión de la circulación vehicular total por colores, pues hay un “protocolo publicado en gaceta que no establece medidas extraordinarias en fase 1, que es entre 150 y 199 puntos Imeca”.

lrc