Un grupo de sujetos aprovecharon que Miguel "El Piojo" Herrera se encuentra residiendo en el estado de Nuevo León, para robar su casa que tiene en la alcaldía Coyoacán, Ciudad de México. Los responsables del crimen se llevaron diversos objetos de valor, relojes de alta gama, y dinero en efectivo, cuyo monto asciende a más de un millón de pesos.
Los empleados de limpieza del actual entrenador del equipo de fútbol Tigres, aseguraron a las autoridades que acudieron al domicilio el miércoles por la tarde y que después de realizar sus labores se retiraron. Sin embargo el jueves, al llegar al inmueble se percataron que habían entrado a robar.
Al realizar una inspección, los trabajadores notaron que faltaba una caja fuerte, en la que el ex estratega del América le dijo a sus empleados que tenía más de 35 relojes, lentes y dinero en efectivo, de acuerdo a lo asentado en la carpeta de investigación, FICOY/UAT-COY-2/UI-1S/D/224/08-2021.
Debido a que el técnico actualmente se encuentra en Nuevo León, fue su apoderado legal quien acudió a interponer la denuncia. El robo fue sin violencia debido a que no había nadie, pero cerca del lugar hay varias cámaras de seguridad las cuales ya son analizadas para tratar de identificar a los responsables.
Cifras de la Fiscalía General de Justicia (FGJ) de la Ciudad de México indican que en el mes de julio se registraron 291 robos a casa habitación sin violencia en la capital, de los cuales la gran mayoría se cometieron en la alcaldía Cuauhtémoc.
Apenas ayer La Silla Rota informó sobre el robo de la casa de uno de los empresarios más acaudalados de la Ciudad de México.
Para robar la casa cuatro hombres y una mujer se hicieron pasar por testigos de Jehova. Consta en la carpeta de investigación que el lunes pasado, uno de los empleados del hombre de negocios escuchó que llamaban a la puerta. Al preguntar de quien se trataba, una persona le contestó que eran representantes de dicha religión y que tenían un paquete para su patrón.
Al abrir la puerta, un individuo lo amagó con un arma de fuego, mientras que otros tres aprovecharon para irrumpir en el domicilio ubicado en la alcaldía Álvaro Obregón. Uno de los sospechosos le tapó la cara al trabajador y lo comenzó a golpear.
"Danos la clave de la caja fuerte o te matamos", le advirtió el delincuente. Ante esta amenaza, la víctima accedió a darles el código. Después lo siguieron golpeando y lo tiraron en el piso del patio.
A lo largo de 30 minutos el empleado escuchó que los criminales movían y sacaban cosas de la casa. Antes de huir, uno de los delincuentes le dijo que no llamara a la Policía.
El empleado se presentó ante la Fiscalía General de Justicia (FGJ) de la Ciudad de México para denunciar el robo, y declaró que al momento del atraco estaba solo en el inmueble.
También aseguró que en el predio hay cámaras de seguridad que captaron el hurto, pero que no tenía acceso a los videos, que necesitaba que su patrón llegara de su viaje que hizo a Corea del Sur.
En cuanto a la identidad de su jefe el trabajador dijo que era un empresario e integrante de la familia De Haene, una de las más acaudaladas de la capital.
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