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Obras irregulares (también) ponen en jaque a Xochimilco

Actualmente se han frenado 34 mega proyectos, cuyos permisos fueron otorgados el gobierno capitalino y la anterior administración delegacional

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Escrito en METRÓPOLI el

Sumado a la contaminación de los canales, crecimiento desordenado de la mancha urbana, sobreexplotación de los acuíferos y crisis de agua, Xochimilco como Patrimonio Cultural y Natural de la Humanidad está en riesgo, ahora, por la construcción de 34 mega proyectos irregulares, los cuales fueron avalados por dependencias del gobierno capitalino y la pasada administración delegacional, encabezada por Miguel Ángel Cámara. 

Avelino Méndez, jefe delegacional de Xochimilco, explicó que por el momento las obras están detenidas debido a que todos los proyectos tienen por lo menos alguna inconsistencia, que va desde violar el uso de suelo, contar con licencias vencidas o ningún permiso y hasta la falsificación de documentos.

Agregó que la viabilidad de Xochimilco como Patrimonio Cultural depende de detener este crecimiento inmobiliario y advirtió que, de concluirse las obras, habrá aproximadamente 400 casas más y se agudizarán los problemas de movilidad, hundimientos diferenciados y suministro de agua. 

“Todas estas obras atentan de forma notable contra lo que es Xochimilco. Debería ser obligación de los gobiernos local y federal de mantener la declaratoria de Patrimonio de la Humanidad. Son 34 obras irregulares, las cuales las hemos podido detener a través de los mecanismos legales con los que contamos en la delegación.

 Las anomalías

Expresó que, de estas 34 obras, 5 megaproyectos -Paseo Xochimilco, Ex Pumitas, Arenal, Club Hípico y Chedraui en Tulyehualco-, de concretarse consumirían más de un millón de litros diarios de agua y esa cantidad es lo que representa la dotación de agua que la delegación aporta a los asentamientos que no tienen red. 

“Esos megaproyectos consumirían lo mismo que por lo menos 100 mil habitantes de Xochimilco (…) nosotros ya tenemos una crisis hídrica fuerte. Si se permite la conclusión de estos proyectos, no sólo estaríamos en crisis, sino entraríamos en una etapa más aguda de desabasto de agua”, sentenció el delegado. 

Comentó que han acudido a las instancias legales a las que tienen derecho, también han enviado la relación de 34 obras a la Asociación de Profesionistas Inmobiliarios, Colegio de Notarios de la CDMX, a las franquicias centrales de esas empresas, como son Walt Mart y al Registro Público de la Propiedad para resguardar los folios.

“Los proyectos dañan el paisaje cultural de Xochimilco, generan una extracción desmedida de agua y sobreexplotación de los mantos acuíferos y además en el caso de Xochimilco ahora la vialidad, que por si ya conflictiva y difícil. Si continúan estas obras toda la movilidad de la delegación estaría comprometida”.

Pidió al gobierno de Miguel Ángel Mancera que se reconsideren todos estos proyectos a través de la evaluación y rectificación de los permisos que dependencias a cargo de su administración dieron como Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex), Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (Seduvi), Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) y la Secretaría de Movilidad (Semovi).

“Esto es parte de ese boom inmobiliario que se está dando es toda la Ciudad de México. Esta parte del avance en Xochimilco, de permitir desarrollos ponen en peligro de inmediato y a largo plazo la vida y los bienes de los habitantes de la delegación”, advirtió.

Obras irregulares

Gustavo Alonso Cabrera Rodríguez, director general de Jurídico y de Gobierno de la delegación Xochimilco, informó en entrevista que las 34 obras irregulares ya estaban iniciadas y algunas avanzadas cuando entró la actual administración de Méndez Rangel, en octubre de 2015.

Añadió que los proyectos recibieron la anuencia de dependencias del gobierno capitalino y de la administración delegacional anterior. 

“Las que están en proceso de construcción y que están paradas, se detuvieron al inicio de la administración del delegado Avelino Méndez. Todas provienen de la administración anterior. Ninguna empezó en el actual gobierno de la demarcación con esas características. Si cumplen con los requisitos y si el uso lo permite, no tenemos inconveniente”.

Las 34 obras tienen un común denominador, primero están en zona de recarga de los acuíferos, por lo tanto, no es adecuada para construir y segundo, la densidad de uso de suelo los limita a cuestiones muy básicas, que no cumplieron.

La mayoría de los proyectos, señaló, pretendían avalarse con un artículo del Reglamento de Construcciones, el cual permite regularizar por obra ejecutada. Sin embargo, alcanzaron a clausurar antes de que las terminaran.

El también antropólogo explicó que los proyectos ni siquiera tienen permisos, sino anuencias en donde se presentaron junto con las manifestaciones de impacto ambiental y manifestaciones de impacto urbano. “Muchas de ellas ni siquiera lo han presentado, otras a la hora de que se les autorizó se les obligó hacer obras de mitigación, las cuales no se realizaron”.

Indicó que se hizo una denuncia ante la Contraloría General de la Ciudad de México para que se hiciera una investigación en contra de los funcionarios delegaciones que avalaron las obras, así como por los folios falsificados y robados. 

La obra que presentó mayor avance cuando se le suspendió fue Terrazas Arenal, una plaza comercial que tenía un 98 por ciento, que además afectó el drenaje del pueblo de Tepepan al interrumpir una de las tres vías del desagüe y violentar la infraestructura preexistente. 

Aclaró que la empresa Chedraui tiene dos tiendas que son irregulares en Tulyehualco y la carretera San Pablo y que, aunque se ampararon para concluir las obras y abrir, no están regularizadas.  

“No han presentado su aviso de termino de obra formal para poderles dar la licencia de construcción por terminada. Lo que queremos es que, si las faltas administrativas son graves llegar al juicio de lesa del expediente y sobre todo buscar que se les cancele la licencia de construcción, y por ende la demolición”. 

Las obras corresponden a 16 complejos inmobiliarios y las demás son plazas comerciales y negocios como panaderías y farmacias.