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Las ardillas también sufren por el coronavirus

Las ardillas del jardín municipal de Texcoco dejaron de recibir alimentos de las personas que acudían a ese lugar, ya que por la pandemia, no hay acceso

Escrito en METRÓPOLI el

Las ardillas del jardín municipal de Texcoco, en el Estado de México, dejaron de recibir alimentos por parte de las personas que acudían a ese lugar, ya que por la pandemia, no tenían acceso; el kiosko y sus alrededores fueron cerrado.

Tenían hambre, husmeaban, buscaban comida tirada entre el follaje, entre las bancas y monumentos, pero nada.

Algunas se empezaron a acercar al portón del mercado municipal San Antonio, se querían arriesgas a jalar algo para comer, pero se regresaban a sus árboles ante el paso de los clientes de esa central de abasto.

El jefe de la policía de Texcoco, Alfonso Valtierra Guzmán, al ver el extraño comportamiento de las ardillas por conseguir comida; de inmediato mandó a comprar dos kilos de cacahuates.

Al llegar los cacahuates, un montón de ardillas bajaron ansiosas para saciar su hambre.

Desde entonces, los policías municipales del sector centro al mando de los comandantes José Abel Galicia Sánchez y Salvador Cortés, con su personal, realizan recorridos para alimentar las ardillas.

Alfonso Valtierra recordó que esta tarea la realiza su personal desde hace dos meses, cuando se intensificó el programa de "Sana Distancia" y se tuvieron que cerrar los accesos al jardín municipal de Texcoco.

El jefe de la policía pidió apoyo a los locatarios del mercado municipal San Antonio para que donarán comida para las ardillas, pero no hicieron caso.

Entonces, se fue a dialogar con la mesa directiva de otro mercado, el Belisario Domínguez, alejado del jardín municipal, y los locatarios ayudaron de inmediato, donando semillas para las ardillas.

Pero como la gente no podía entrar al jardín municipal, desde hace dos meses, los policías municipales se dedican a alimentar a las ardillas.

Ellas, aunque son muy precavidas y nerviosas, pero cuando ven a un uniformado cerca, bajan de sus árboles y se estiran a la mano del oficial para tomar sus alimentos.

Ahora, dar de comer a las ardillas del jardín municipal de Texcoco, ya es parte de las novedades de los rondines policiacos.

Las ardillas no son las únicas habitantes del jardín local, sino también las palomas, pero ellas pueden volar a buscar semillas.

Aún así, los policías también les esparcen alimentos para que resistan la pandemia.


rgg