Main logo

"La iglesia no estaba lista, preferimos no abrir"

Todavía no estaban preparadas para recibir feligreses y se optó por no exponerlos, dice el padre Víctor y recalca que adultos mayores no podrán volver

Escrito en METRÓPOLI el

El 26 de julio las misas no volvieron a todas las iglesias de la Ciudad de México. En las colonias con semáforo epidemiológico rojo los feligreses aun no pudieron oír misa. 

Un ejemplo es en San Pedro Mártir, Tlalpan, que permanece en semáforo rojo desde hace dos semanas. La iglesia de la cabecera permaneció con las puertas cerradas, lo mismo que la del Ejido de San Pedro Mártir. Pero otras capillas pertenecientes a la misma parroquia no estaban en foco rojo, sí podían abrir y  optaron por no hacerlo, como Chimalcoyoc, Mirador del Valle y Axalco, pegado a San Andrés Totoltepec. Decidieron esperar una semana más, dijo a La Silla Rota el sacerdote Víctor Jiménez González, de San Pedro Mártir.

“Fui a hacer una revisión de lo que se nos pide, que es marcar las bancas y ver el equipo que nos ayuda a hacer el filtro para ingresar al templo. Muchos de ellos no estaban disponibles y eso nos obliga a retrasarnos un poco, para más seguridad”, explicó el padre.

ADULTOS MAYORES VOLVERÁN MÁS TARDE

Hubo personas que mostraron inquietud y llamaron a la parroquia de San Pedro Mártir para saber si reabrirían. Algunos también para mostrar su disposición de participar en las ceremonias religiosas.

“Se les contestó que por el momento en semáforo rojo la parroquia no podría abrirse”.

Pero aunque reabran, Jiménez González aclaró que los adultos mayores no van a poder regresar a las iglesias aunque se cambie el semáforo.

Por otra parte, mientras llega la hora del regreso en San Pedro Mártir, sanitizan los templos con apoyo de autoridades.

Parroquia del pueblo de San Pedro Mártir, por estar en semáforo rojo, se encuentra cerrada

“Hemos tenido acercamiento con el subdelegado de Chimalcoyoc, en Tlalpan, quien nos ha hecho el favor de buscar la sanitización de espacios de la parroquia y unas de las capillas. También con el director del Centro de Salud de San Pedro Mártir”.

Gracias al trabajo que han tenido cercano a las autoridades fue que se logró hacer conciencia para evitar que el festejo patronal fuera masivo. Reconoció que hubo algunas confusiones, como creer que el santo pasaría casa por casa.

“Nunca falta el teléfono descompuesto, se dijo que íbamos a ir casa por casa, nunca dijimos eso. Vamos a sacar al santo precisamente para que la gente no salga al templo y no se aglomere, y pueda estar desde su casa tranquila. Es muy fuerte la tradición en el pueblo y temíamos que se hiciera una aglomeración”.

SE HACEN LA PRUEBA

Mientras llega la hora de la reapertura, que ocurrirá cuando la colonia abandone el semáforo rojo, los padres de las capillas ya se hicieron la prueba para verificar que no tienen covid-19. Jiménez González también se la aplicó la semana pasada, y en tres días le entregaron los resultados, que salieron negativos. Se la hizo en el centro de salud.

“Es parte de lo que ofrecen las autoridades y lo buscamos para animar a las personas para concientizar”.

Cuestionado sobre si se puso nervioso, reconoce que sí, pese a que no tenía síntomas. Ver a quienes los aplican con sus trajes de cuerpo completo, impone, dijo.

“Están con sus trajes como de astronauta, muy bien, son cuidadosos, siguiendo las medidas. Es un exudado de garganta, dura unos cinco minutos, es incómodo, te ponen un hisopo que te meten por la nariz”, describió la prueba.

POSTEOS PARA CONCIENTIZAR

Incluso, compartieron con la comunidad que se hicieron la prueba, y en Facebook tuvieron una reacción de tres mil personas. También cuando se sanitizan los templos y se informa al respecto en las redes sociales, obtienen numerosos likes.

Consideró positivo que la comunidad reaccione bien a que ellos se hagan las pruebas, porque así predican con el ejemplo, sobre todo entre quienes, como Santo Tomás, son escépticos.

“Hay muchas personas que no consideran real esto. Sabemos de San Miguel Topilejo, que es vecino, que tiene más casos. Entre curas platicamos y el de allá nos dice que las personas están haciendo su vida normal, la gente anda como si no pasara nada, por falta de conciencia, que no se cree, mientras que acá es una vida acorde con las necesidades. Hay gente que tiene miedo y se pone a pensar, pero hay otras que viven al día, las que trabajan en el comercio informal que andan persiguiendo, como todos, la chuleta”.

De acuerdo con el último reporte de colonias con más casos, en San Miguel Topilejo se registran 310 casos por cada 100 mil habitantes, y en San Pedro Mártir 215.27. Ambos son pueblos, se ubican en Tlalpan y están en color rojo.

Sacerdote Víctor Jiménez González, de la iglesia San Pedro Mártir

LAS BODAS QUE  NO FUERON

El padre Víctor informa que por la situación que se vive se han cancelado unas 15 bodas. Otras se han pospuesto y la fecha más probable es a partir de octubre. No falta el que diga ‘a ver si no me arrepiento’”.

CERRAR CICLOS

Cuando ocurre algún fallecimiento y se hace una ceremonia luctuosa, les preguntan a los deudos si no falleció por covid-19.

“Si murió de covid, le damos la bendición en el atrio brevemente y vámonos”.

Pero no se niegan los servicios. Aunque a veces es complicado por la tradición que hay de despedir a los seres queridos.

“Hemos notado que la gente debe cerrar ciclos, despedir a sus muertos. No se les ha negado hasta ahora pero se les piden muchas reglas. Como es un pueblo hay personas que pertenecen a alguna mayordomía y debemos controlar que no venga mucha gente.

“Todavía pasa. Hace unos días, falleció un chalmero, no pueden entrar, la gente se queda afuera echando cuetes. En general han sido muy comprensivos, a veces los que vienen acompañando se ponen rudos, pero les decimos ‘lo siento, si no, vamos a cerrar la iglesia” y entonces reaccionan bien”.

(Sharira Abundez)