En la Central de Abasto han muerto docenas, quizás cientos, de personas por contagios de covid-19. A un nivel que “ni siquiera el gobierno lo sabe con seguridad”, publicó este jueves el diario estadounidense New York Times en primera plana.
La publicación asegura que estaba claro desde el principio que el coronavirus golpearía con fuerza en Iztapalapa, alcaldía donde se encuentra el gran mercado de la Ciudad de México.
Es la alcaldía donde más vive población de toda la capital, “con unas dos millones de personas apiñadas en 116 kilómetros cuadrados de comercios abarrotados y espacios de construcción que prácticamente no han interrumpido sus labores”.
“La pobreza circunscribe la vida, con escasez crónica de agua. Cientos de miles viven día a día, mucho más temerosos del hambre que de cualquier virus”, se puede leer en el reportaje.
IMPOSIBLE, CONFINAMIENTO DURANTE PANDEMIA
La población de Iztapalapa no podía permitirse el confinamiento por la pandemia. “Para la gran mayoría de la gente, el riesgo de enfermedad o muerte simplemente se ha convertido en el precio de la supervivencia”.
Afirma que la región ya se prepara para una de las peores crisis económicas del mundo. La desigualdad se está agravando y algunos funcionarios ya están hablando de una década perdida.
La Central de Abasto nunca cerró completamente, pues es necesaria para México: abastece el 80 por ciento de la capital y el 30 por ciento del país.
INCREDULIDAD ANTE LA COVID-19
Al comienzo de la pandemia más de 100 mil personas trabajaban ahí, casi nadie portaba cubrebocas un mes después de iniciada la emergencia sanitaria.
Pero el tráfico peatonal fue disminuyendo hasta casi detenerse; funcionarios colocaron carteles advirtiendo sobre la covid-19 y pidieron a trabajadores a que reportaran si se enfermaban, mismos que al principio fueron ignorados.
“Creo que se lo inventaron para subir los precios a los pobres. No sería la primera vez”, comentó uno de los comerciantes al diario. Otro vendedor asintió con la cabeza y comentó: “Mira alrededor. ¿Ves a alguien aquí muriéndose?”
Para el mes de mayo, autoridades capitalinas estimaron que una de cada diez personas tuvieron que ser intubadas con ventiladores en la ciudad, habían estado en el mercado.
cmo