Main logo

En Jardines de Morelos convivían con los “monstruos de Ecatepec"

Vecinos narraron los extraños sucesos que se presentaron en su colonia: propuestas de tríos sexuales, localización de cueros cabelludos y venta de raros quesos

Escrito en METRÓPOLI el

Montse aún no lo puede creer. El miércoles 3 de septiembre, un día antes de que la pareja de Juan Carlos y Patricia fueran detenidos acusados por cometer 10 feminicidios, ella había recibido una oferta para tener relaciones sexuales con ambos.

Textualmente señaló que Patricia la invitó a hacer “un sándwich”, un trío sexual. Ella no aceptó, pero ante la insistencia se zafó y le dijo a Patricia que hace unos días había fallecido su padre, lo que además era cierto. Patricia comprendió y desistió de su petición. 

Montse comparte la anécdota en la estética Yesenia, ubicada en el 530 de Playa de Tijuana, en Jardines de Morelos, donde arriba vivía la pareja conocida como los “monstruos de Ecatepec” que ha conmocionado a la opinión pública. 

Cuestionada sobre cómo se siente “pues imagínese”, es su respuesta. “Hasta miedo me da”, dice, de manera pausada y algo ensimismada. Renuente a dar su nombre completo, precisamente por el miedo, cree que la pareja no delinquía sola, pues en la colonia se habla de que en los secuestros de las mujeres que fueron sus víctimas usaban una camioneta negra, por lo que deduce que hay más cómplices.

Acompañada de Yesenia, que es la dueña del negocio de la estética, ambas reconocen que hay miedo en la colonia por los recientes sucesos, pero es un temor viejo con el que conviven desde hace tiempo. 

Montse, quien es vecina de la colonia que está a unos 10 minutos del Circuito Mexiquense, dice que hace unas semanas encontraron por la casa de su mamá una cabellera larga, con cuero cabelludo, y unas bolsas de carne. 

El olor fétido hizo que decidieran llamar a las autoridades. Se presentaron unos policías en una patrulla, bajaron, recorrieron, observaron, minimizaron el hallazgo y lo calificaron de brujería.

“Ahora puedo creer que era de ellos (la pareja)”, suelta Montse.

EL ALTAR

Pero también hay miedo en quienes pasan por Playa Pie de la Cuesta, en el terreno baldío donde supuestamente fue detenido el 4 de octubre Juan Carlos, cuando en una carriola llevaba restos y donde se dice tiró restos de sus víctimas.

En el sitio -lo mismo que en donde vivía la presunta pareja homicida, no hay policías- se encuentran cintas de seguridad alrededor y una cartulina que critica el actuar de las autoridades de justicia del Estado de México, que pide ayuda e informa de 3 mil desaparecidas sólo en Ecatepec, el municipio donde se ubica Jardines de Morelos.

¿Qué se sabe de los feminicidas de Ecatepec?

Frente al predio también hay una especie de altar, una cubeta de las que son usadas en las construcciones para cargar el cemento, que ahora es depósito de veladoras, y el envase de un garrafón de líquido limpiador es usado como florero.

Ahí llegan personas a leer los cartelones o a dejar una veladora más. Un par de señoras pasan y acceden a platicar con La Silla Rota

Recuerdan que el caso de Arlet Samanta, una de las presuntas víctimas de la pareja y quien desapareció en abril, fue muy famoso. Una de ellas, que vive en “Fovi”, una colonia vecina, menciona que en las calles estaban pegadas hojas con el rostro de Arlet, y lo mismo en la central de abasto. 

“Que se había extraviado”, se leía. También en páginas de denuncias vecinales de Facebook se informó de la desaparición, pero sólo se volvió a saber de ella con la detención de la pareja.

La otra señora añade que en la colonia también se habla de hombres desaparecidos. No es la única causa del miedo. Frecuentemente se escuchan balazos, hay asaltos, violaciones, y hace unos 15 días se esparció el rumor de que por el kínder en la zona de Islas dejaron una camioneta con varios cuerpos. 

Así es el "sombrío" Facebook del "Monstruo de Ecatepec"

Uno de los niños que acompañan a las señoras recuerda que sus maestros les comentaron a sus alumnos, entre ellos él, que se había dado aviso a las autoridades del Consejo Técnico del “macabro hallazgo”.

Las señoras agregan que también han escuchado de los hallazgos de tres mujeres a las que se les extrajo su bebé. Una de ellas de plano dice que ella ya tiene pensado regresar a su pueblo, donde seguro morirá de viejita y no de manera violenta.

Otra señora recuerda que antes de la ola de desapariciones de mujeres en Jardines de Morelos y que ahora se relacionan con la pareja feminicida, hubo una por desapariciones de niños, pero las autoridades hicieron poco. 

“Los policías van, toman fotos y se van, dicen que harán algo, pero no hacen nada”, se queja.

Como muda confirmación de la inseguridad, una placa colocada en una casa frente al predio refuerza la idea: “casa vigilada por los vecinos, persona, vehículo o moto sospechoso que permanezca más de 10 minutos será reportada a las autoridades”.

EL SEÑOR QUE VENDÍA QUESOS Y ELOTES

A unos días de la detención de Juan Carlos y Patricia, una de las causas del estupor entre los vecinos es que no parecían una pareja aterradora. 

Tanto Yesenia como Montse recuerdan que la pareja tenía unos nueve meses de vivir en Playa de Tijuana. Montse ya sabía de ellos, porque trabajaron en el salón Castillo, donde eran los encargados de la portería.

También su hermana Cristina conocía a Patricia, quien acudía a un comedor comunitario propiedad de Cristina. Siempre iba apurada, dice.

Ambas coinciden, lo mismo que Yesenia, que llegó a decir que estaba embarazada, pero no se le veía.

Un aspecto que ha llamado la atención de la pareja es que se mudaban cada cierto tiempo. En el caso de Playa Tijuana parecía que repetirían el patrón. 

Pero es porque la casera los iba a echar, asegura Yesenia, debido a que tenían un perro, no limpiaban y luego parte de la suciedad bajaba del tercer piso. Ya tenía planeado pedirles que devolvieran el departamento, pero fueron atrapados antes.

El proceder sádico con que presuntamente actuó la pareja ha causado especulaciones sobre ellos. Por ejemplo, Montse dice que Juan Carlos vendía quesos y ella le llegó a comprar algunos. Pero luego de su detención, se comenzó a especular que empleaba sangre de sus víctimas para hacerlo. Con una mirada de horror, afirma que los quesos tenían un aspecto raro.

Por su parte, la señora que fue entrevistada frente al baldío sabía que Juan Carlos vendía elotes y cree que sí le llegó a comprar. “¿Cuándo te ibas a imaginar?”, dice con un rostro consternado.

JUAN CARLOS TAL VEZ FANFARRONEA

La activista en contra de casos de feminicidios, Frida Guerrera, pidió a la Fiscalía del Estado de México investigar más casos de desapariciones posiblemente vinculados con la pareja, ocurridos entre 2014 y 2016.

“Yo he rastreado casos para tratar de hacer una ficha para ubicar por qué se encuentran o se sospecha que son víctimas estas tres chicas. ¿Y las demás? Hay otras que no sabemos dónde están, una niña de 2014 de 16 años, similar, desapareció en Toluca y la pareja vivió por la zona. Hay que hacer algo exhaustivo de ver las zonas donde se movían. Yo creo que no podemos descartarlo”.

Guerrera también pidió revisar si de verdad Juan Carlos está involucrado en 20 asesinatos, como ha declarado, porque puede ser sólo un alarde suyo y aunque hay similitudes entre las víctimas, no necesariamente tienen el mismo perfil, y hay más desapariciones en otros municipios.

“Habla de que desde 2012 asesina a la primera. Últimamente comenzaron a desaparecer en Tecámac, que queda cerca, pero lo característico es que tenía un radio. Tampoco podemos achacarle todo”.

Cuestionada sobre si se debió emitir la alerta de género, considera que es un instrumento poco útil, porque al final la realidad es que las búsquedas se hacen tarde.

“La gente tiene todo el derecho a presentar su denuncia. La toman, pero si le digo ‘sabes que mi hija tenía celular, se lo llevo, ubica dónde está el teléfono’, tardan meses para pedir sábanas, lo pudieron hacer con Arlet y pudieron evitar por lo menos dos mujeres más. Fue una falta de seriedad de las autoridades, de policía regional que indica todo eso”, dijo.

“Y es que vas a denunciar a San Cristóbal, que es Ecatepec, el municipio con más denuncias y que menos atiende el tema de género. Reconozco al fiscal que haya dicho la neta, encontramos por lo menos 10 mujeres, pero el tema de desaparecidas no se está tomando en cuenta, que hace años se reporta la desaparición de mujeres todos los días en Edomex, en los municipios de Chicoloapan, Naucalpan, Nezahualcóyotl, Ecatepec no se diga. Se estaba diciendo de un grupo que operaba en San Agustín que las cazaba como depredadores para violarlas y asesinarlas. Es muy delicado que un sujeto que desde el manto de la impunidad haya asesinado mujeres desde 2012 y nadie se ha dado cuenta. Es grave que ni como autoridades ni sociedad nos hayamos dado cuenta”, concluye la activista.

ams