TOLUCA.- La muerte desde octubre deja de ser un vacío en el alma de los vivos, se convierte en una fiesta de sabores, olores y tradiciones que busca revivir a través de las manos de artesanos de Alfeñique de Toluca, Estado de México y de quienes se dedican a la elaboración de dulces que se ponen en la ofrenda que ilumina los hogares de quienes añoran la visita de sus fieles difuntos.
Por segunda ocasión, el dulce sabor de la Muerte logró vencer a la covid-19 por lo que, a partir de este viernes y hasta el 2 de noviembre se llevará a cabo la tradicional feria del alfeñique en la capital mexiquense, con el 70 por ciento del aforo y con más artesanos que el año pasado, cuando sólo pudieron participar 52. Para esta edición que durará tres semanas, más de lo proyectado, se espera contar con los 81 integrantes del gremio que endulza la partida de los más queridos.
La intención es que se logre mantener las tradiciones y que las creaciones de pasta de azúcar y dulces tradicionales no falten en las ofrendas a los fieles difuntos.
Sin embargo, el encarecimiento de las arterias primas y la incertidumbre que trajo consigo la pandemia, mermó la producción de los artesanos, quienes decidieron guardar todas las medidas, incluso no permitir la entrada de extraños a sus talleres para poder generar y estar presentas en una tradición que se ha mantenido desde hace más de 80 años en Los Portales de Toluca.
Los artesanos reconocen que también tuvieron miedo al coronavirus, pues al menos cuatro integrantes de la Unión de Artesanos del Alfeñique de Toluca, fallecieron entre marzo y agosto del año pasado.
Para los días de muertos no solo se preparan las calaveritas blancas, también tumbas, catrines, dulces de calabaza, chongos zamoranos, que le ponen un toque azucarado a la pérdida de una familia.
Asimismo se destacó que los puestos alrededor de Los Portales se colocarán bajo las medidas de la Sana Distancia y no se permitirán aglomeraciones en la zona para salvaguardar la salud de los asistentes y de los artesanos.
fmma