Main logo

De nuevo ingreso, reguladora involucrada en choque del Metro

Los peritajes e indagatorias realizadas por la Fiscalía arrojan que la reguladora no actuó conforme a los manuales técnicos del Sistema de Transporte Colectivo

Escrito en METRÓPOLI el

La Fiscalía General de Justicia (FGJ) de la Ciudad de México determinó que el choque de dos trenes de la línea 1 del Metro, ocurrido el 10 de marzo pasado, fue provocado por una omisión de uno de los conductores y de una reguladora del Sistema de Transporte Colectivo (STC), ésta última era de nuevo ingreso según fuentes de la institución.

De acuerdo con personal del STC, después de una capacitación y de un curso las personas que se acreditan para ser reguladores del Puesto Central de Control (PCC) - desde donde controlan el tráfico de los convoy- son supervisadas durante un mes antes de que realicen su labor por si solas. En lo que respecta a la operadora que estaba a cargo de la línea 1 aquella noche de la colisión, ésta a penas tenía poco de haber cumplido dicho procedimiento.

Los peritajes e indagatorias realizadas por la Fiscalía arrojaron que la reguladora no actuó conforme a los manuales técnicos del Sistema de Transporte Colectivo, al igual que el conductor del 33 que impactó al 38 en la estación Tacubaya, lo que dejó 41 lesionados y un muerto.

Aquel día, el conductor Alan "N" del tren 33 recibió alertas en su tablero de control. Ante esta situación, el sistema de seguridad del tren actuó bloqueándose en automático.

Ante esta situación el chófer estaba obligado a aplicar el frenado del convoy mediante la maniobra de estacionamiento de emergencia en rampa, como lo señalan los manuales operativos en el STC.

No obstante, la reguladora de la que se desconoce su identidad hasta el momento, no instruyó al conductor a realizar esas medidas que implicaban mantener el convoy detenido de forma segura, sino por el contrario, le instruyó a que avanzara.

En ese momento el conductor cambió el modo de pilotaje automático a manual limitado con la autorización de la reguladora del Puesto Central de Control (PCC1). Otra omisión que cometió la reguladora fue que a lo largo de ocho minutos en los que el tren estuvo en inmediaciones de la estación Observatorio, que fue alrededor de 8 minutos, nunca ordenó que se aplicara el freno de estacionamiento de cada vagón, desalojar el tren, así como prevenir a tiempo al operador del convoy 38 que se encontraba en la estación Tacubaya, lo cual no ocurrió.

Estas omisión y diferentes maniobras provocaron que se perdiera la presión del aire del sistema de frenado, lo que hizo que el tren 33 avanzara en reversa e impactara al tren 38, según determinó la Fiscalía, informe que coincide con el que dio a conocer la empresa alemana TÜVRheinland.

Ayer, el vocero de la Fiscalía, Ulises Lara, dio a conocer dicho resultado, y descartó que el incidente halla sido por una falla mecánica, ya que el tren 22 acababa de salir de mantenimiento, como lo informó La Silla Rota.


(djh)