CIUDAD DE MÉXICO (La Silla Rota).- De 497.1 millones de pesos que la federación asignó en 2015 a la Ciudad de México, del Fondo de Aportaciones para la Seguridad Pública (FASP), el Gobierno capitalino no había ejercido 50.5 millones, todavía hasta junio de 2016.
De acuerdo con los resultados de la Cuenta Pública 2015, el monto de ese subejercicio está pendiente de aclarar ante la Auditoría Superior de la Federación (ASF), e incluye 8.5 millones de pesos de intereses generados.
El subejercicio detectado, según el informe de la ASF, impactó en los objetivos y líneas de acción de los ejes en materia de seguridad pública, y generó retraso en las acciones de los Programas con Prioridad Nacional.
Además en el ejercicio de los recursos, el Gobierno de la Ciudad de México incurrió en inobservancias de la normativa, principalmente en materia de adquisiciones, así como del Presupuesto de Egresos de la Federación para el ejercicio fiscal 2015, la Ley de Coordinación Fiscal y la Ley General de Contabilidad Gubernamental.
Esas irregularidades generaron un probable daño a la Hacienda Pública Federal por un importe de 67.5 millones de pesos, señala el documento.
"El Gobierno de la Ciudad de México no dispone de sistema de control interno que le permita identificar y atender los riesgos que limitan el cumplimiento de los objetivos del fondo, la observancia de su normativa y el manejo ordenado, eficiente y transparente de los recursos", expone el reporte.
En el dictamen se destaca que el Gobierno capitalino cumplió con sus obligaciones de transparencia sobre la gestión del fondo, al entregar con oportunidad los informes trimestrales sobre el ejercicio, destino y resultado de los recursos transferidos; sin embargo, presentó incongruencia en sus importes reportados.
Y las metas establecidas para los indicadores oficiales de desempeño del fondo se cumplieron parcialmente.
Por ejemplo, de acuerdo con los indicadores utilizados por la ASF, se determinó que, al 31 de diciembre de 2015, sólo se había alcanzado el 78.9 por ciento de las metas programadas, y que en 2015 el número de delitos cometidos por cada mil habitantes fue de 3.7 por ciento.
"El Gobierno de la Ciudad de México no realizó una gestión eficiente y transparente de los recursos del FASP, apegada a la normativa que regula su ejercicio y no se cumplieron sus objetivos y metas", enfatiza el informe.
Mando policial
En cuanto al Subsidio a las Entidades Federativas para el Fortalecimiento de las Instituciones de Seguridad Pública en Materia de Mando Policial (SPA), el Gobierno de la Ciudad no había ejercido al 31 de diciembre de 2015, el 0.1 por ciento de los 139 millones 203 mil pesos transferidos por la federación ese año para dicho programa.
En el ejercicio de esos recursos, el Gobierno local incurrió en inobservancias a la normativa, principalmente en materia de la Ley General de Contabilidad Gubernamental y la Ley de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios del Sector Público.
Las anomalías generaron un probable daño a la Hacienda Pública Federal por un importe de 10.8 millones de pesos.
"El Gobierno de la Ciudad de México no dispone de un sistema de control interno adecuado para identificar y atender los riesgos que limitan el cumplimiento de los objetivos del subsidio, la observancia de su normativa y el manejo ordenado, eficiente y transparente de los recursos, lo que incidió en las irregularidades determinadas en la auditoría", indica el informe.
Además, agrega, se incumplieron las obligaciones de transparencia sobre la gestión del referido subsidio, ya que la información no fue publicada en la Gaceta Oficial.
"No se establecieron metas para los indicadores oficiales de desempeño del subsidio", refiere el documento.
lrc